"Fui torturada en centros del MİT durante tres meses"

Ziynet Sağlam habló sobre su experiencia en Afrin después de que fue capturada y arrestada durante los ataques de invasión. Sağlam dijo que fue torturada en centros que pertenecen al MİT, servicio de inteligencia turco.

Ziynet Sağlam está recluida en una celda solitaria en la Cárcel Cerrada de Mujeres de Tarsus por acusaciones de "pertenencia a una organización terrorista", y ha estado en huelga de hambre durante los últimos 11 días, ya que su apelación de ser transferida a una sala donde estan sus compañeros ha sido rechazada por la administración de la prisión. Sağlam dice que continuará su protesta hasta que se satisfaga su demanda, y compartió lo que le sucedió en Afrin y Turquía a través de sus abogados.

Sağlam dijo que estaba en el distrito de Jindirese durante la operación contra Afrin. Afirma que Turquía cometió crímenes de guerra allí, a través de MİT y miembros de las FSA, y dio cuenta de lo que presenció.

¿Qué sucedió durante la operación?

Sağlam dijo que las zonas residenciales fueron bombardeadas y destruidas, hogares y tiendas fueron saqueados como "botín de guerra", se cortó el agua y hubo casos de hostigamiento y violación durante la operación, y agregó que docenas de personas, incluidos niños, mujeres y ancianos, se vieron obligados a emigrar de Afrin por los ataques. Sağlam también dijo que el mundo fue cómplice a través del silencio frente a este crimen contra la humanidad.

También contó que un padre y su hija perdieron la vida en la misma casa en la que se encontraba, durante un ataque aéreo el 10 de marzo de 2018 en una aldea de Jindires. Sağlam resultó herida en el mismo ataque y se quedó en las ruinas por un tiempo.

Sağlam fue capturada por las FSA y los soldados turcos cuando ella salía de las ruinas. Sus captores la desnudaron y le pusieron un uniforme de las YPJ. Ella también fue acosada y amenazada: "Me tomaron fotos así. Para lucir bien y para encubrir la masacre que cometieron, los soldados turcos colocaron varios platos de comida sobre una mesa, me forzaron a sostener un vaso en la mano y me tomaron fotos. Los comandos de Crimson Beret con pistolas y cuchillos tomaron videos, cantando takbir. Luego me pusieron en una habitación y me ataron las manos, los pies y me vendaron los ojos. Por la noche me llevaron a otra casa y me torturaron con porras, cables y mangueras".

Sağlam dijo que perdió el conocimiento varias veces, debido al nivel de tortura: "Esta gente hacía de cuenta que querían cortarme la garganta con los cuchillos que tenían. Cada vez que volvía, amenazaban con decapitarme. Luego me llevaron de allí a un baño. Allí me quitaron las ropas andrajosas y me dijeron que me pusiera el pijama que trajeron. Luego me llevaron a una mezquita. Cantando el takbir, intentaron decapitarme frente a la mezquita. No había bebido agua durante días, así que pedí agua. Estaban apretando el cuchillo contra mi garganta. Algún tiempo después alguien los llamó y me metieron en un automóvil para llevarme de Afrin a Azaz.

"Los interrogatorios los realizaron hombres del MIT"

Sağlam dijo que fue torturada durante todo el viaje. En Azaz, la pusieron en la misma celda que 5 mujeres de Afrin que habían sido sometidas a torturas violentas. Sağlam fue interrogada por un hombre que, según ella, era miembro del MİT, y fue torturada y amenazada de violación por orden del mismo hombre. La mujer también dijo que los miembros de MİT en este centro la mostraron a otros detenidos bajo tortura para su identificación.

"Me colgaron en una jaula"

Fue torturada sistemáticamente durante más de un mes allí, luego fue llevada a Antep con las manos y los pies atados, los ojos vendados, y una bolsa sobre su cabeza. La mantuvieron esperando mucho tiempo desnuda en Antep, luego los miembros del MİT le pusieron en un vestido negro y la colocaron en una habitación con un solo colchón de espuma negra, con cables de alimentación esparcidos en todo su alrededor.

"Tenía heridas en todas partes, y las plantas de mis pies estaban llenas de ampollas. Pude sentir que mi carne se cocinaba mientras me electrificaban", dijo Sağlam, y agregó que la pusieron en una especie de jaula colgada, y la sometieron a varios otros métodos de tortura.

Sağlam fue torturada durante 20 días allí, según su relato, y fue llevada de regreso a Azaz. La mantuvieron en un pabellón para 5 personas con 38 mujeres que habían sido sometidas a tortura, hostigamiento y violación. Estaban todas traumatizados, y "cada segundo en la celda era una tortura".

Amenazada para que no hable

Sağlam dijo que tuvo que cortarse el pelo porque estaba demasiado sucio después de 2 meses y 20 días de tortura. Agregó que los prisioneros reciben una pequeña cantidad de comida, solo una vez al día. También relató que después de 3 meses la llevaron a Kilis y se enfrentó a un fiscal. Fue forzada a dar una declaración en cámara contra el PKK: "Hubo presión psicológica en la oficina del fiscal. Trajeron una cámara. Me dijeron que dijera que el PKK tortura a la gente. No acepté. El miembro del MİT que me torturó en Azaz dijo: 'No le contarás a nadie lo que te hicimos, lo que viste. No hablarás con nadie. Si lo haces, te encontraremos y te mataremos". Luego fui arrestada en el tribunal al que me remitieron y enviada a la prisión de Kilis, donde permanecí durante 23 días. Luego fui exiliada a la prisión de Tarsus".

Sağlam fue desnudada en la prisión de mujeres cerrada de Tarsus. Ella fue llevada a un hospital y se le dio un informe de las heridas y signos de quemadura por batería en su cuerpo. Ella no fue colocada en la misma sala que otros detenidos porque "las heridas en su cuerpo no se han curado".