Un ataque turco con UCAV apunta a una casa en Makhmur

El Estado turco continúa con sus ataques genocidas en varias partes del Kurdistán, apuntando en primer lugar a los asentamientos civiles.

Un vehículo aéreo de combate no tripulado (UCAV) del Estado de ocupación turco atacó el martes una casa en el campo de refugiados de Maxmur, en el sur del Kurdistán (norte de Irak).

Los detalles sobre las consecuencias del ataque no estaban disponibles de inmediato.


El ataque coincidió con la visita de una delegación iraquí de alto nivel a Makhmur. Según informes procedentes del terreno, el Comandante General de las Fuerzas Armadas iraquíes, el Comandante de las Operaciones Conjuntas, el Comandante de las Fuerzas Conjuntas y varios otros oficiales militares han realizado una visita a la zona.

Unas 12.000 personas viven en el campo de refugiados autoadministrado de Maxmur, situado a unos 60 kilómetros al suroeste de Hewlêr (Erbil), en la Región del Kurdistán de Irak (KRI). La mayoría de los residentes se vieron obligados a abandonar sus pueblos en la región de Botan del norte del Kurdistán (sureste de Turquía) en la década de 1990 debido a la represión del Estado turco. Tras una odisea de varios años y la vida en varios campamentos, en 1998 fundaron el de Maxmûr, al borde del desierto. Oficialmente, Makhmûr está bajo la protección de la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), que sólo está presente nominalmente. La organización abandonó el campamento durante los ataques del grupo terrorista Estado Islámico en 2014 y no ha vuelto desde entonces.


         


        

Entre los residentes hay ancianos y enfermos, pero también niños. Solo hay 3.500 niños en edad escolar. El campo de refugiados no sólo es atacado por la aviación turca y el ISIS, sino que también está embargado desde hace tres años por el partido gobernante del Kurdistán del Sur, el KDP, que colabora con el fascismo turco. 

El 1 de febrero, los ataques aéreos del ejército turco tuvieron como objetivo una base militar de las Fuerzas de Autodefensa en Makhmur. Dos miembros de las Fuerzas de Autodefensa fueron martirizados durante la agresión. Los civiles que intentaron ayudar a sus familiares también fueron blanco de los ataques y decenas de ellos resultaron heridos. 

En un comunicado tras el ataque, el Mando de las Fuerzas de Autodefensa del Campo de Refugiados de Maxmur dijo que el ejército turco, que no ha conseguido resultados contra la guerrilla, "ha atacado Maxmur, Shengal y Rojava de manera viciosa e inmoral."

"Nosotros, como Fuerzas de Autodefensa del Campamento de Rüstem Cudi, ampliaremos aún más nuestra resistencia abrazando el legado de nuestros mártires. Derrotaremos al Estado turco fascista que es hostil a los pueblos", dijeron las Fuerzas de Autodefensa locales e instaron a la comunidad internacional, a las Naciones Unidas y a las instituciones de derechos humanos a alzar su voz contra los ataques al campo de refugiados y a detener los crímenes contra la humanidad cometidos por el Estado turco.