En un comunicado público emitido el 12 de mayo de 2025, la junta directiva del XII Congreso del PKK (Partido de los Trabajadores del Kurdistán) anunció el martirio de Ali Haydar Kaytan (Fuat) y Rıza Altun, dos figuras destacadas del movimiento de liberación kurdo. El comunicado describió a Ali Haydar Kaytan como símbolo de lealtad al líder del pueblo kurdo, Abdullah Öcalan, a la verdad y a la vida sagrada, y a Rıza Altun como símbolo de camaradería con la libertad. Tras este anuncio, el pueblo kurdo de las cuatro partes del Kurdistán y del extranjero se unió para honrar a los dos mártires en actos conmemorativos.  

En una declaración que conmemora el séptimo aniversario del martirio de Ali Haydar Kaytan, caído el 3 de julio de 2018, la copresidencia del Consejo Ejecutivo de la KCK (Unión de Comunidades del Kurdistán) conmemora “con gran respeto, amor y gratitud al camarada Fuat, quien fue el primero en unirse a Abdullah Öcalan en su camino de lucha por la libertad, y un líder fundador de este movimiento y un gran pionero inquebrantable”.

La declaración de la KCK, que conmemora a todos los mártires de la revolución y la democracia en memoria de Kaytan, decía lo siguiente:

Sin duda, el martirio del camarada Fuat ha sido muy difícil para nuestro movimiento y nuestro pueblo. Fue una gran fuente de inspiración ideológica, organizativa y esclarecedora para nuestra lucha. A lo largo de su trayectoria revolucionaria de medio siglo, alcanzó grandes valores para nuestro movimiento y nuestro pueblo. Como ser humano, camarada y revolucionario, dio lo mejor de sí. El camarada Fuat, al igual que Haki Karer y Kemal Pir, fue uno de los primeros camaradas en unirse al líder del pueblo kurdo Abdullah Öcalan. Desde el momento en que se conocieron hasta su caída como mártir, aportó gran fuerza a la lucha por la libertad con una fe, determinación, resolución y entusiasmo inquebrantables, dedicando toda su vida a ella. Dedicó cada momento de su vida a la lucha, el trabajo, la concentración, la intensificación, la educación y el liderazgo de sus camaradas. El camarada Fuat, el sabio de las montañas y del Kurdistán, con su conocimiento acumulado, su poder intelectual y su inmensa intensidad emocional creó un profundo significado que siempre fue fuente de fortaleza y determinación para sus compañeros en la lucha. Su profunda comprensión del líder Abdullah Öcalan sirvió como fuente de moral y guía para que sus compañeros superaran cada dificultad. Cuando el líder Abdullah Öcalan recibió la noticia de su martirio, dijo: "Él fue el camarada que me comprendió mejor que yo mismo".

La contribución del camarada Fuat al desarrollo de nuestra comprensión del líder Abdullah Öcalan fue inmensa. No solo fue un gran organizador y pensador, sino también un gran educador. Su esfuerzo, labor y profundidad en este sentido fueron inmensos. Su ira hacia todo lo que impedía a la humanidad y a la sociedad alcanzar la libertad fue inmensa. Vivió con esta ira a cada instante y la transformó en fuerza intelectual y de lucha.

El camarada Fuat, cuyo espíritu revolucionario y contribuciones a la lucha por la libertad kurda son indescriptibles, es un gran símbolo de la verdad y la vida sagrada. Es un camarada que merece ser comprendido y recordado de esta manera. Hacemos un llamamiento a todo nuestro pueblo y amigos para que conmemoren la memoria de nuestro gran mártir Fuat en el séptimo aniversario de su martirio. Lo recordamos una vez más con respeto, amor y gratitud. Al revitalizar la Sociedad Socialista Democrática, alcanzaremos el sagrado objetivo de la libertad para todos nuestros revolucionarios y mártires de la libertad, encarnado en el camarada Fuat. Reiteramos este compromiso una vez más en esta ocasión.