AKP paga los salarios de los grupos aliados con botines de guerra

Resultó que Turquía no pagó los sueldos de los grupos jihadistas aliados que liberó a Afrin durante dos meses, diciendo que "los botines de guerra que obtuvieron de Afrin les bastará por un año".

Los informes sugieren que hubo disturbios entre las pandillas que Turquía derivó de Al-Qaeda, ISIS y Al-Nusra, ya que Turquía no ha pagado los salarios de algunas de estas durante los últimos dos meses mientras atacaban e invadían Afrin.

Aunque se dice que el recorte salarial está relacionado con la crisis económica y el rápido aumento del dólar en Turquía, se supo que el estado turco le dijo a las pandillas que "el botín de guerra que recibieron de Afrin le bastará por un año".

Los grupos aliados, que el presidente turco Tayyip Erdogan llama "Revolucionarios Nacionales de Siria", con una fuerza estimada de entre 25 y 30 mil hombres, reciben salarios que oscilan entre 80 y 250 dólares.

Según los informes, a muchos de los grupos de pandillas no se les han pagado sus salarios durante los últimos dos meses, mientras que los grupos fundados por la agencia de inteligencia turca MIT, como Sultan Murat Brigades y Sultan Abdulhamit, continúan recibiendo sus salarios.

Por otro lado, las personas en Afrin afirman que las tropas turcas están desplegadas en el centro y los distritos de la ciudad de Afrin, mientras que las pandillas están estacionadas en las aldeas. En consecuencia, las pandillas han acelerado sus saqueos en los últimos días diciendo que "no nos dejarán a Afrin".

Mientras tanto, siguiendo el acuerdo hecho entre Turquía y Rusia para la "evacuación de East Ghouta a cambio de Afrin", el estado turco lleva y acomoda a las familias de las pandillas traídas desde East Ghouta en el distrito y aldeas Jindires de Afrin.