Los Comités de la Paz son una parte esencial del nuevo modelo de gobernanza diseñado tras la Revolución de Rojava en Norte de Siria.

Los comités han cambiado la noción de justicia y su implementación y se han erigido como verdaderos pilares de la justicia social conseguida a través de acuerdos mutuos y el diálogo.

El primer comité fue establecido el 26 de octubre de 2013 en la provincia de Til Kocher en el Cantón de Qamishlo, y ha estado trabajando sin descanso desde su fundación.

Este comité, que actúa de acuerdo al Contrato Social del Confederalismo Democrático que fue aprobada en Norte de Siria, tiene la crucial misión de solucionar la mayoría de problemas y asuntos controvertidos en la región.

El Comité de Paz cuenta con 7 miembros en el distrito y ha solucionado 100 de los 115 casos abiertos en los últimos 3 meses. El Comité trata cuestiones como herencias, violencia machista y asesinatos.

El Comité ha resuelto una disputa que duraba ya 20 años entre las familias Metred y Wesran. Esta disputa era uno de los problemas más importantes del distrito.

Bekirî Mehmud, uno de los administradores del Comité de Paz, ha dicho que han resuelto 45 de los 46 casos abiertos durante el mes de julio.

Mehmud ha señalado que el comité tiene por objetivo la justicia social y la paz interna al tiempo que ha afirmado que la prolongación de esta disputa también era producto de los métodos de justicia empleados en el pasado.

El Confederalismo Democrático defiende un sistema de justicia diversificado, en el que algunos asuntos no necesitan ser resueltos en costosos procesos judiciales sino que son tratados en instituciones menores como los Comités de Paz.

La responsabilidad la tienen las personas, que están en el centro del paradigma del Confederalismo Democrático.

La responsabilidad, tanto colectiva como individual, juega un importante papel ya que implica el reconocimiento de los errores propios y asumir y reparar el daño causado, sin necesidad de acudir a tribunales ni al sistema tradicional de justicia.

Esto también significa que los tribunales no están colapsados con casos que pueden ser resueltos a través del diálogo y la negociación.