Los familiares estaban llevando a cabo una vigilia frente a la cárcel cerrada tipo M desde el 9 de abril para dar voz a los presos que están en huelga de hambre contra el aislamiento impuesto al representante del pueblo kurdo, Abdullah Öcalan.

Los familiares de los presos han sido acosados de forma sistemática por la policía cada día. Este jueves, la policía ha ido un paso más allá cargando contra los activistas y deteniendo a 4 personas.

Los abogados que se habían acercado hasta la cárcel para apoyar a los familiares fueron también objeto de la brutalidad policial. La policía también ha eliminado el material tomado por los abogados y los periodistas.