El Movimiento Revolucionario Unido de Mujeres (KBDH) afirma en una declaración escrita que la única manera de que las mujeres vivan en condiciones iguales y humanas es "a través de una lucha mayor y más efectiva".
La declaración enfatiza que "la revolución es ahora una necesidad en condiciones en las que es imposible controlar el poder fascista del AKP-MHP, y mucho menos derrocarlo, a través de la legalidad burguesa".
La declaración del KBDH añade: "El sistema capitalista dominado por los hombres reproduce y profundiza la contradicción de género cada día. En este momento de la historia, el ahora anticuado capitalismo quiere manejar y controlar a las mujeres como antes. El estado como instrumento de violencia colectiva y los hombres individuales se oponen a las mujeres como una fuerza aplastante y destructiva".
La declaración continúa: "Los ataques de masacre y encarcelamiento contra las organizaciones líderes de la lucha por la liberación de la mujer continúan sin cesar. Somos las compañeras y camaradas de todas las mujeres que actuaron por ellas mismas y por sus hermanas y se comprometieron en la lucha contra este fascismo dominado por los hombres del AKP-MHP. No haremos la paz con su sistema dominado por los hombres. Estamos luchando contra la dominación masculina, su mentalidad y todas sus instituciones estructurales."
La declaración terminó con las siguientes observaciones: "Declaramos una vez más que nuestros objetivos son todas las personas e instituciones que utilizan la violencia contra las mujeres, matan a las mujeres, quieren convertir a las mujeres en esclavas sexuales, aplican el acoso y la violación como una continuación de la mentalidad colonial, especialmente en el Kurdistán".