Las cooperativas fortalecen a las mujeres en Rojava

La organización kurda Kongreya Star apoya a varias cooperativas en Rojava en las que las mujeres trabajan de manera autónoma y, por lo tanto, se defienden a sí mismas y a la comunidad, al mismo tiempo. Ahora hay 16 nuevas cooperativas en Cizîrê.

En la corriente de la guerra y la guerra civil, las estructuras autónomas en Rojava han creado, después de la revolución, una nueva sociedad democrática basada en consejos y comunas populares. Los diversos grupos de población étnica, religiosa y social en el norte y este de Siria participan igualmente en este proceso. Este concepto de confederalismo democrático, implementado en Rojava, de reducir el estado a instituciones locales en pueblos, ciudades y vecindarios y transferir todos los órganos de toma de decisiones a estas instituciones, es la alternativa democrática de base para vivir más allá del estado y se remonta al líder de los kurdos Abdullah Öcalan. Se inspiró en las ideas del socialista estadounidense Murray Bookchin sobre el comunalismo libertario y las adaptó a las realidades de Oriente Medio. 

El reclamo de Öcalan es desarrollar una alternativa a la modernidad capitalista. Para esto, no solo es fundamental la autoorganización democrática de la sociedad, sino también el desarrollo de una economía alternativa. Contra la economía capitalista, que todavía es dominante en el norte de Siria, se debe desarrollar una "economía social democrática" basada principalmente en las cooperativas. Estos se establecieron en amplias áreas y gradualmente adquirieron un papel más importante. 

La organización paraguas del movimiento de mujeres kurdas, Kongreya Star, es el principal contribuyente al desarrollo de una economía femenina autónoma en las áreas autónomas del norte y el este de Siria. Durante años, las cooperativas de mujeres han aumentado en tamaño y número, ya que son una forma importante para que las mujeres reduzcan gradualmente su dependencia de sus padres y esposos. Solo en la región de Cizîrê, Kongreya Star promueve la participación equitativa de miles de mujeres en docenas de cooperativas agrícolas, para aumentar los beneficios para todos los miembros y las comunidades. Mientras tanto, se han agregado 16 cooperativas más, proporcionando un medio de vida para 409 mujeres y sus familias. Las cooperativas están ubicadas en Dêrik (al-Malikiya), Tirbespî (al-Qahtaniyya), Girkê Legê (al-Muabbada), Amûdê y Hesekê.

Otra región donde el sistema de economía democrática fue más pronunciado es Serêkaniyê (Ras al-Ain). Allí, un área agrícola de cuatro hectáreas se dividió entre 150 mujeres y sus familias. Con la ocupación turca de la ciudad, amparados por la luz verde dada por Rusia y los Estados Unidos, las cooperativas fueron destruidas. La gente tuvo que huir y sus campos quedaron destruidos.

Según Mehe Zoro, de la junta directiva de Kongreya Star en Amûdê, se planean nuevas cooperativas. Los fondos son provistos por el Comité Económico: "Aunque los ataques en el norte y el este de Siria tienen un impacto particularmente negativo en nuestro trabajo económico, la organización de la economía es la base para organizar una vida libre. Esta conciencia ha creado un espíritu de solidaridad entre las mujeres para trabajar juntas y fortalecer su capacidad de organizarse y ser autónomas. Esta solidaridad entre las mujeres debe ser apoyada activamente".