Nacida en Girkê Legê en 1966, Aqide Ali Osman estuvo activamente en la vanguardia de las acciones revolucionarias patrióticas desde la década de 1980.

Después de conocer el Movimiento por la Libertad del Kurdistán, Aqide Ana [madre], como se la conoce, fue una figura destacada en la difusión de la idea de la mujer libre. Ella resistió hasta su último aliento. Aqide Ana, quien fue arrestada dos veces por el gobierno de Damasco por las acciones revolucionarias que lideró, reanudó su lucha inmediatamente después de salir de prisión.

Aqide Ana, quien se ganó el amor de todos los segmentos de la sociedad con su actitud y personalidad compañera, tomó su lugar en Kongreya Star para liderar la lucha de las mujeres. Aqide Ana, que luchó ferozmente contra la mentalidad dominante de los hombres, también participó en el Comité de Mediación Girkê Legê.

Después del arresto del líder Abdullah Öcalan por el estado turco en 1999, Aqide Ana, se vistió de negro y comenzó a luchar por la libertad del líder Öcalan desde entonces.

El Estado turco invasor y sus mercenarios llevaron a cabo ataques contra Serêkaniyê y Girê Spî el 9 de octubre de 2019. Aqide Ana, que una vez más encabezó las filas de la resistencia contra los mercenarios que cometieron crímenes brutales contra la población en ambas ciudades, participó en la convoy que se dirigió a Serêkaniyê el 13 de octubre.

Los aviones de combate del ejército turco invasor bombardearon brutalmente el convoy civil. Decenas de civiles murieron en el bombardeo. Aqide Ana, que estaba entre los mártires caídos, había dicho minutos antes de caer: "Iremos a Serêkaniyê y apoyaremos la resistencia de nuestro pueblo. El estado turco ocupante afirma que huimos. Nunca hemos huido; nunca correremos Todo el mundo debe saber bien que no nos inclinamos ante nadie. Las únicas fuerzas en las que confiamos son las YPG y las YPJ".

Cuando Turquía y sus mercenarios atacaron y ocuparon Afrin en 2018, Aqide Ana fue a Afrin. Una vez más estaba en la línea del frente. Akif Mistefa, hijo de Aqide Ana, quien crió a sus hijos con el mismo espíritu patriótico, dijo: “Antes de la revolución de Rojava, mi madre tenía grandes dificultades debido a las políticas del gobierno sirio. A pesar de su edad avanzada y su enfermedad, nunca abandonó la resistencia. Les mostró a todos que continuaba su lucha contra todos los problemas con gran determinación".