El objetivo de esta guerra fue desde el principio destruir la voluntad de las mujeres en el norte y el este de Siria porque las mujeres fueron desde el primer día de la revolución de Rojava una fuerza dinámica eficaz.
Un nuevo informe ha sido publicado por Navenda lêkolîn û parastina mafên jin (Centro de Investigación y Protección de los Derechos de la Mujer en Siria).
El informe trata de las violaciones de la ocupación turca y de las facciones armadas leales a ella contra las mujeres en el norte y el noreste de Siria.
El informe subraya que "el número de desplazados por el ejército de ocupación turco y sus mercenarios puede estimarse en más de un millón de civiles, la mayoría de los cuales son el pueblo kurdo y el 60% son mujeres desde el comienzo de los ataques de las facciones y organizaciones armadas apoyadas por Turquía, empezando por la ocupación de Afrin y pasando por Serekaniye y Gire Spi hasta hoy. Además de la pérdida de miles de vidas, miles más fueron heridos".
El informe añade: "Las mujeres y los niños más afectados por la brutal guerra de Siria. Las facciones armadas leales al Estado turco han violado la inviolabilidad de los hogares y han matado, secuestrado y violado a cientos de mujeres en Afrin, Serêkaniyê y Tel Abyad, con el conocimiento y la supervisión del Estado turco ocupante, a pesar de los cuatro Convenios de Ginebra y sus protocolos que confirman la protección de las mujeres en tiempos de guerra y conflicto armado. Convenios como la Declaración Universal de Derechos Humanos, la Convención Internacional sobre los Derechos del Niño y los dos pactos internacionales de derechos civiles y políticos, económicos, sociales y culturales, así como la Convención Internacional contra la Violencia contra la Mujer y la Convención sobre la eliminación de todas las formas de discriminación contra la mujer (CEDAW), y que son sistemáticamente violados por Turquía y sus grupos armados".
En el informe también se subraya que "la Corte Penal Internacional es responsable de castigar al Estado turco por todos los delitos cometidos por Turquía". El objetivo de esta guerra fue desde el principio destruir la voluntad de las mujeres en el norte y el este de Siria porque las mujeres fueron desde el primer día de la revolución de Rojava una fuerza dinámica eficaz frente a los enemigos de la libertad y decidieron obtener sus derechos. El reciente ataque turco contra los miembros de la Conferencia Estelar Zahra Barkal y sus compañeros, es un intento de romper esa fuerte voluntad, a través de la cual el gobierno de Erdogan y sus leales ven su inevitable muerte".
El informe registra y detalla 85 asesinatos de mujeres; 123 casos de secuestro y tortura de mujeres; 168 casos de heridas a mujeres.
