La costa siria y las montañas de Latakia han experimentado acontecimientos dramáticos, ejecuciones basadas en afiliaciones regionales y sectarias y violaciones de los derechos humanos sumadas a crímenes de guerra cometidos por fuerzas de los servicios de seguridad y el Ministerio de Defensa y fuerzas auxiliares, durante los cuales cientos de civiles inocentes han sido asesinados a sangre fría, informó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (SOHR).
Desde el 6 de marzo, el Observatorio ha documentado la muerte de 973 civiles en 39 masacres y otras ejecuciones individuales cometidas por fuerzas militares y de seguridad en la costa siria y las montañas de Latakia. Las muertes de civiles se distribuyen regionalmente de la siguiente manera:
Latakia: 545
Tartus: 262
Hama: 156
Homs: 10
"Esto forma parte de una escalada sin precedentes de acciones de represalia y genocidio que comenzó el 7 de marzo en cuatro provincias sirias. Las acciones sangrientas, que todavía continúan, coinciden con el incendio de viviendas civiles y desplazamientos forzados, mientras que hasta ahora ninguna autoridad internacional ha interferido o tomado acción alguna para poner fin a esas masacres", afirmó el SOHR.
El observatorio señaló que los ataques también dejaron muertos 231 miembros de los servicios de seguridad y del Ministerio de Defensa y 250 pistoleros alauitas afiliados al antiguo régimen.
Así, el número total de víctimas mortales desde el inicio de los atentados el 6 de marzo ha llegado a 1.454.
Ante estas impactantes estadísticas y el dramático aumento de la violencia contra los civiles en Siria, el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (SOHR) pidió a la comunidad internacional que intervenga inmediatamente y envíe equipos de investigación internacionales para documentar las flagrantes violaciones cometidas contra los civiles.
El SOHR también dirige un llamamiento urgente a las autoridades sirias en Damasco para que exijan responsabilidades a los miembros de las fuerzas de seguridad y del Ministerio de Defensa que han estado implicados en ejecuciones cometidas contra civiles inocentes, y subraya que eludir la rendición de cuentas por esos crímenes alienta más crímenes en el futuro; esto, a su vez, amenaza la estabilidad política y social y la unidad en Siria.