El Centro de Estudios Estratégicos de Rojava (NRLS) ha organizado un foro en el Centro Cultural de Arte Aram Tigran, en la ciudad de Rimêlan, Qamishlo, titulado "Genocidio étnico y cambio demográfico en el norte y el este de Siria".

En el foro se examinaron las formas y los mecanismos que podrían seguirse para contrarrestar los ataques de genocidio étnico y las políticas para cambiar la estructura demográfica.

En la sesión moderada por Sîham Dawûd, Director del Sindicato de Docentes de Dêrik, hicieron presentaciones el abogado Aynûr Zêd Pasha, miembro de la Asamblea de Justicia Social de Cizre, el copresidente de la Asamblea del Cantón de Kobanê, Enwer Mislim y Hikmet Hebîb, vicepresidente ejecutivo y copresidente del Consejo Ejecutivo del Consejo Democrático Sirio (MSD).

El Foro terminó con la lectura de una declaración final de Leyla Siwar.

La declaración decía: "El foro promovido por el NRLS contó con la participación de políticos, investigadores, abogados, defensores de derechos humanos y más de cien personas de la Administración Autónoma y organizaciones de la sociedad civil de la región.

Los participantes presentaron sus informes, investigaciones y opiniones sobre las políticas de genocidio étnico y cambio demográfico llevadas a cabo por el Estado turco en las zonas ocupadas del norte y el este de Siria. El foro también discutió formas y métodos para prevenir estas prácticas, para enjuiciar a quienes implementan estas prácticas en el ámbito internacional y para eliminar los efectos de estas".

1. Los informes deben mostrar y exponer el número de víctimas civiles, las difíciles condiciones de las personas desplazadas, las propiedades confiscadas del pueblo, la invasión de un Estado vecino, así como las violaciones de los derechos humanos y del derecho internacional del Estado turco y sus mercenarios. En este marco, se debería pedir a los tribunales internacionales y a las organizaciones de derechos humanos que cumplan con sus responsabilidades a fin de restablecer los derechos de las víctimas y castigar a los delincuentes.

2. Asegurar que la comunidad internacional cumpla con las obligaciones de los acuerdos internacionales. La comunidad internacional debe poner fin a las políticas de genocidio y al cambio de la estructura demográfica aplicada por Turquía a los pueblos del norte y del este de Siria y debe ejercer presión sobre el Estado turco. Para que esto ocurra, las organizaciones internacionales y las Naciones Unidas deben proponer una estrategia política común. Además, a los que firmaron el acuerdo de alto el fuego en el norte y el este de Siria (EE.UU. y Rusia) se les debe pedir que detengan los ataques del Estado turco contra la región, que pongan fin a la ocupación y que creen las condiciones para que la gente regrese a sus hogares en un entorno pacífico.

3. La Administración Autónoma de Siria septentrional y oriental impide el establecimiento de un sistema terrorista en la región que amenaza al mundo entero. Esta Administración ha jugado un papel importante en la derrota de la organización terrorista ISIS y en el monitoreo de las estructuras celulares del ISIS. La paz es dominante en el campo de la administración. Sobre esta base, como reveló el Estado turco en los atentados de ocupación, todo tipo de ataques y orientaciones dirigidos a esta administración significan apoyo al terrorismo y provocan una crisis humanitaria. La comunidad internacional debe apoyar a esta administración en todos los ámbitos, especialmente en el político, militar y económico.

4. La Administración Autónoma es el representante legítimo de los pueblos del norte y del este de Siria. Las Fuerzas Democráticas Sirias (SDF), la fuerza de defensa legítima del norte y el este de Siria, han hecho grandes sacrificios por la paz y la seguridad, incluida la de la comunidad internacional. El hecho de que los representantes legítimos de los pueblos del norte y el este de Siria no estén incluidos en el Comité Constitucional sirio establecido para la solución de la crisis siria es una gran injusticia para esos pueblos y no puede aceptarse. Todas las instituciones internacionales pertinentes, en particular las Naciones Unidas, deben cumplir sus responsabilidades e incluir la voluntad de los pueblos del norte y el este de Siria en todas las actividades relacionadas con Siria.

5. A fin de garantizar la paz y la justicia en la región y erradicar las ideas radicales, debe establecerse un tribunal internacional en el que se juzguen los crímenes de lesa humanidad en Siria, especialmente en el norte y el este del país. En este tribunal, el Estado turco y los grupos mercenarios ISIS / Al-Nusra que cometen crímenes contra la humanidad y guerras bajo el nombre de "Ejército Nacional Sirio" deben ser juzgados. Además, el "Ejército Nacional Sirio" debe ser incluido en la lista de organizaciones terroristas.

6. Los pueblos del norte y del este de Siria están experimentando una vez más los ataques vividos por su abuelo, una vez más llevados a cabo por el Estado turco. Los pueblos de la región deben aumentar su apoyo a la Administración Autónoma del Norte y el Este de Siria y a las SDF contra estos ataques.