La portavoz del HDP, Ebru Günay, habló sobre la moción para prohibir su partido, que fue rechazada por el Tribunal Constitucional el miércoles en Ankara. Aseguró que el rechazo no fue solo por razones formales, sino por la falta de fundamento de la acusación. "Por lo tanto, la tesis presentada por la Fiscalía General de que el HDP es el foco de las acciones antiestatales no es válida", indicó Günay en la conferencia de prensa en la sede del HDP.
"El auto de acusación carece de base legal. Si hubiera sido aceptado, habría abierto heridas profundas en la conciencia de la sociedad. Con su decisión, la Corte Constitucional, al menos por el momento, no se ha incorporado a las maquinaciones que violan la principios de política democrática y normas legales internacionales”, sentenció Günay.
Ebru Günay reiteró que la solicitud para prohibir el HDP no tiene motivaciones legales sino políticas. Señaló que el rechazo no fue producto de los procedimientos, sino del fondo. Según la Corte Constitucional, la acusación no estableció una conexión suficiente entre las "acciones de los órganos pertinentes del partido" y las acusaciones. La moción de prohibición acusa al HDP de convertirse en "el foco de acciones contra la indivisibilidad de la nación". "En esto se basa toda la acusación y la Corte Constitucional no ve pruebas suficientes para ello. En este sentido, es una evaluación de fondo", indicó la portavoz del HDP.
Respuesta a Bahçeli
En sus comentarios, la portavoz del HDP también se refirió a la reacción del líder del MHP, Devlet Bahçeli, al rechazo de la solicitud de prohibición. El líder del nacionalista de derecha MHP había atacado duramente al Tribunal Constitucional, diciendo: "¿El Tribunal Constitucional defiende la soberanía del poder judicial o es un clamor por el separatismo? Al igual que el cierre del HDP, el cierre del Tribunal Constitucional debe ser un objetivo inaplazable por ahora".
Al comentar sobre las declaraciones de Bahçeli, Ebru Günay denunció: "Este no es el lenguaje de un partido político, sino de un golpista que ataca al poder judicial". Señaló que la amenaza estaba dirigida no solo contra el tribunal más alto de Turquía, sino contra todos los actores en las conversaciones para una solución sostenida entre el estado turco y el movimiento kurdo y toda la oposición enumerada en la solicitud de prohibición. “Bahçeli describió así la hoja de ruta que preveía para el período posterior a la prohibición del HDP. Después de introducir un régimen fiduciario a nivel municipal, ahora también declaró públicamente la guerra al más alto tribunal del país y pidió su cierre, como si fuera la tienda de su padre", argumentó la portavoz del HDP.
Günay concluyó: "Esto ya no se trata solo del HDP. La amenaza está dirigida contra el Tribunal Constitucional como una de las instituciones más importantes del país. Es una amenaza que concierne a todos y puede cambiar fundamentalmente el destino de Turquía. Hacemos un llamado a todos que los partidos políticos se opongan a esta lógica golpista y alcen la voz a favor de una política limpia y un ambiente democrático. Toda la sociedad es atacada en sus valores democráticos. Y esto no está ocurriendo en secreto, sino públicamente. La desestimación de los cargos en el procedimiento de prohibición contra nuestro partido no es suficiente, el expediente debe cerrarse definitivamente. El contenido de estos procedimientos va mucho más allá del HDP. Cada nuevo paso que dé el poder judicial afecta al futuro de la democracia en este país. Recordar esto es una responsabilidad histórica".