La gente está tomando las calles en Irán y Rojhilat (Kurdistán Oriental) durante cinco días, contra la pobreza y las políticas opresivas del régimen iraní.

La televisión estatal iraní anunció que 12 personas murieron durante las protestas.

En el tercer día del levantamiento, cuatro personas murieron en la ciudad de Dirûd, en la provincia de Lorestán. Otras dos personas perdieron la vida durante las protestas en la ciudad de Izeh de la provincia de Ahwaz anoche. Aún no está claro dónde se han producido otras muertes.

Según cifras oficiales, 410 personas han sido detenidas en Teherán, Kermanshah y Arak desde el día en que comenzaron las protestas. Aún así, se informa que la cantidad de detenidos es más alta.

Por otro lado, los manifestantes establecieron oficinas de las fuerzas iraníes en varios pueblos y ciudades, y quemaron los edificios de Besij (paramilitares que trabajan para el estado) en varias ciudades.