Las fuerzas estatales iraníes detuvieron a dos kurdos en el distrito de Diwandere de la provincia de Sine, en el Kurdistán Oriental, y en la ciudad de Meriwan. El número de detenidos en las últimas 24 horas asciende a 6.
Según los medios de comunicación del Kurdistán Oriental, un joven kurdo llamado Mizefer Darayi fue detenido en Diwandere, y un joven de 17 años llamado Mardîn Dêhqanî fue detenido en Meriwan.
El número de detenidos en redadas llevadas a cabo en la región sin justificación alguna desde el domingo asciende a 6.
La Organización de Derechos Humanos del Kurdistán anunció en un comunicado el domingo que las fuerzas iraníes detuvieron a cuatro ciudadanos kurdos: Mihemed Emîn en Diwandere, Newîd Şerîfî del pueblo de Kanî Spî, Ferhad Qemerî del pueblo de Kutek, y Fuad Muradî del pueblo de Kêlekew en Diwandere.
Estas detenciones se producen justo antes del aniversario de la rebelión de Jin, Jiyan, Azadi. Un levantamiento sin precedentes que comenzó tras la detención y asesinato de una joven kurda, Jina Amini, a manos de la policía moral en octubre de 2022. Las fuerzas iraníes mataron a cientos de personas y detuvieron a miles durante el levantamiento. Muchas fueron ejecutadas. Grupos de derechos humanos afirman que el gobierno iraní utiliza la pena de muerte para reprimir la protesta pública.
