Mélanie Vogel, co-presidenta del Partido Verde Europeo, así como Mina Jack Tolu y Vula Testsi, miembros del Grupo del Partido Verde Europeo, han declarado en un comunicado: "Recep Tayyip Erdoğan ha gobernado Turquía durante los últimos 20 años. Durante la última década, su gobierno se ha vuelto cada vez más autoritario tanto dentro de Turquía como en el extranjero. Sus ataques contra la comunidad kurda en Turquía y en los países vecinos continúan hasta hoy. Su represión de los opositores y opositoras políticos, los medios de comunicación independientes, la libertad académica y los derechos de la mujer ha hecho que Turquía sea conocida por algunos de los abusos más sistemáticos de los derechos humanos en Europa".

La declaración continúa: "La mala gestión económica de Erdoğan ha llevado a Turquía a la cola de los países de la OCDE, independientemente de los indicadores que se utilicen. La inflación se ha disparado y una parte cada vez mayor de la población no puede permitirse comprar alimentos ni cubrir otras necesidades básicas. La respuesta del gobierno ha sido vilipendiar a una amplia gama de grupos sociales: periodistas, académicos, mujeres, personas LGBTI, y la lista continúa. La polarización se ha vuelto extrema e insoportable. Y por último, pero no por ello menos importante: e gobierno de Erdoğan se ha caracterizado por una corrupción y un clientelismo desenfrenados, incluido el duro saqueo y la explotación de la naturaleza y los bienes públicos en beneficio propio. El ejemplo más trágico fue la escandalosa falta de preparación y la incompetente gestión de las labores de rescate tras el terremoto de febrero de 2023. Más de 50.000 personas murieron en Turquía, y cientos de miles siguen heridas o desplazadas".

La declaración añade: "Nos solidarizamos con los ciudadanos y ciudadanas y los partidos políticos que buscan un cambio democrático en Turquía. Creemos firmemente que una Turquía democrática es necesaria, posible y deseable. Las encuestas de opinión muestran sistemáticamente que la mayoría no apoya a Erdoğan ni a sus aliados. Estas elecciones tratan ante todo de restaurar la democracia en Turquía.

Es vergonzoso que el régimen de Erdoğan haya decidido reprimir a sus rivales políticos. Denunciamos la represión sistemática y el procedimiento de prohibición por motivos políticos iniciado por Erdoğan para excluir al HDP (Partido Democrático de los Pueblos) de la campaña electoral. Debido a ello, el HDP ha decidido hacer campaña bajo la bandera del Partido de la Izquierda Verde (YSP) y apoyarles con toda su fuerza para concurrir a las elecciones con ellos. En las últimas semanas, cientos de personas pertenecientes a la oposición y especialmente al HDP, así como al YSP, han sido detenidas, entre ellas políticos y políticas, abogados y abogadas, y periodistas. Decenas de ellos y de ellas siguen detenidos a día de hoy. El pasado fin de semana, un grupo violento próximo a los partidos gobernantes atacó a la oposición en mítines y actos de la campaña electoral en varias ciudades. Varias personas resultaron heridas. Nuestro más sentido pésame y nuestro deseo de una pronta recuperación a las víctimas de estos atroces ataques. Debemos ser claras: no se trata sólo de ataques a ciudadanos y ciudadanas y candidatos y candidatas individuales, sino de ataques al proceso democrático".

La declaración finaliza: "La reciente represión política se produce tras años de flagrante desprecio por las normas democráticas básicas. El Ministerio del Interior de Turquía se ha negado a registrar el Yeşiller Partisi (Partido de la Izquierda Verde), a pesar de varias demandas ganadas por este último. Hoy Turquía no es un país libre y democrático, pero el cambio está en el horizonte.

Prevemos una extraordinaria movilización de los ciudadanos y las ciudadanas de Turquía para ejercer sus derechos democráticos e ir a votar el domingo. Hacemos un llamamiento a las autoridades turcas para que se abstengan de interferir en el proceso electoral y se comprometan con unas elecciones libres y justas. Y enviamos nuestro apoyo a nuestros socios y socias, amigos y amigas, que trabajan por una Turquía democrática, ecológica, libre y basada en los derechos de las mujeres.

Esperamos que se abra un nuevo capítulo para Turquía y el resto de Europa. Esperamos escribirlo juntos y juntas".

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