Se prolonga la detención de los tres hombres kurdos en Irán y crece el temor a la pena de muerte

Tres hombres kurdos llevan detenidos más de un año por presunta "participación en el asesinato de un oficial de seguridad" durante el levantamiento de 'Jin, Jiyan, Azadi'.

Pena de muerte

La Fiscalía Pública y Revolucionaria de Bukan, en la provincia de Azerbaiyán Occidental, ha prorrogado la detención temporal de los civiles kurdos Rauf Sheikh-Maroufi, Mohammad Faraji y Kamran Soltani durante dos meses más, según ha informado la Red de Derechos Humanos del Kurdistán (KHRN).

Los tres hombres kurdos, que anteriormente habían sido acusados de "propagar la corrupción en la tierra" (efsad-e fel arz) por su presunta "participación en el asesinato de un agente de seguridad" durante el levantamiento antigubernamental "Mujeres, Vida, Libertad" en Bukan, llevan más de un año detenidos.

La prolongación de su detención temporal, a la luz de la acusación que pesa contra ellos de "propagar la corrupción en la tierra", que conlleva la posibilidad de la pena de muerte en Irán, ha suscitado preocupación por la posibilidad de que puedan ser condenados a muerte.

Sheikh-Maroufi, Faraji y Soltani fueron detenidos por las fuerzas de seguridad en Bukan durante las protestas del 26 de diciembre de 2022, el 22 de febrero de 2023 y el 27 de febrero de 2023, respectivamente, y trasladados al centro de detención del Ministerio de Inteligencia en Orumiyeh, provincia de Azerbaiyán Occidental.

El Ministerio de Inteligencia sometió a las tres personas a tortura en régimen de aislamiento y las presionó para que hicieran confesiones forzadas en relación con el cargo de "participación en el asesinato de un agente de seguridad" en Bukan.

A pesar de haber sido sometidos a graves torturas físicas y psicológicas, los tres han negado rotundamente los cargos.

Al final del período de interrogatorio, el 10 de junio de 2023, los tres hombres fueron trasladados a la prisión de Bukan, donde permanecen en prisión preventiva a la espera de nuevos avances en su caso.

Se les ha negado el derecho a elegir su propio abogado, y se les ha asignado un abogado de oficio.

De acuerdo con el artículo 286 del Código Penal Islámico, "Cualquiera que cometa extensamente delitos contra la integridad física de las personas, delitos contra la seguridad nacional o extranjera, difusión de falsedades, perturbación del sistema económico del país, incendio provocado y destrucción, etc., se considera un corruptor en la tierra".