El combatiente de las HRE Welat Qerejdax cayó mártir en la resistencia contra la ocupación turca, ha informado el mando de las Fuerzas de Liberación de Afrin (HRE) en un comunicado.

Según el comunicado, el combatiente cayó como mártir el 23 de octubre en la región de Afrin (Efrîn). Las HRE expresan sus condolencias a sus familiares y a la población kurda en el comunicado.

Welat Qerejdax, cuyo nombre de nacimiento era Seyithan Temel, procedía de Amed, en el Kurdistán Norte. Cuando comenzó la Revolución de Rojava en 2012, se unió a la lucha de liberación kurda. Según las HRE, al principio luchó en el Kurdistán Sur contra el ISIS. Resultó gravemente herido. Tras recuperarse, se trasladó a la parte occidental del Kurdistán. Allí participó en las ofensivas de liberación dirigidas por las Fuerzas Democráticas Sirias (SDF) en Serêkaniyê, Hesekê, Şedadê, Sirrîn, Raqqa y Tabqa.

Tras la ocupación de Afrin por parte de Turquía y sus milicias yihadistas, Welat Qerejdax se unió a las HRE. El grupo de resistencia ha querido rendir homenaje al combatiente con las siguientes palabras: «Hevalê Welat fue un militante completamente dedicado a la libertad. Llevó una vida revolucionaria y se caracterizó por su valor y determinación. A pesar de las innumerables heridas –llegó a perder un ojo– no se desvió ni un milímetro de su ideal de asegurar la liberación de su pueblo. Con su solidaridad con los compañeros y su carácter sincero, siempre convencía a los que le rodeaban y le daban fuerzas. Dejó su nombre en letras de oro en la historia de las HRE».

Las HRE

Las Hêzên Rizgariya Efrînê (HRE) se fundaron en 2018 después de que Turquía ocupara Afrin. El grupo de resistencia lucha con el objetivo de liberar las zonas de Siria ocupadas por Ankara y permitir el retorno de la población desplazada de Afrin.

El antiguo cantón de Afrin está ocupado por Turquía desde marzo de 2018. Desde entonces, las violaciones de los derechos humanos y los crímenes de guerra están a la orden del día en la que fue la región más segura de toda Siria. Además de una política colonial clásica, Turquía también practica una política de limpieza étnica, que ha expulsado a cientos de miles de personas de sus zonas de asentamiento tradicionales. El cambio demográfico a favor de Turquía y su fuerza de invasión islamista, crímenes como secuestros, torturas, extorsiones y asesinatos, así como los continuos ataques de artillería, se producen a diario y con la aprobación de facto de la comunidad internacional.

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