El régimen del AKP secuestró las ciudades metropolitanas del sudeste de Turquía de Amed (Diyarbakır), Mardin y Van el pasado 19 de agosto, destituyendo a los alcaldes democráticamente elegidos en las urnas y nombrando fideicomisarios afines al régimen en su lugar. Desde entonces, las protestas no han cesado ni un solo día en estas ciudades.

Las multitudes se han vuelto a reunir en la Avenida Lise que conduce al edificio del Ayuntamiento de Amed. Diputados del HDP, Madres de la Paz y representantes de organizaciones de la sociedad civil en la ciudad han participado en la sentada que se ha llevado a cabo junto a los residentes. Una delegación alemana de visita en la región, también ha tomado parte en las protestas.

La policía ha acordonado la calle y ha amenazado a la multitud, que cantaba canciones de resistencia kurdas.

El comunicado de prensa emitido hoy por la diputada del HDP por Amed, Feleknas Uca, decía lo siguiente: “Mandaremos a los fideicomisarios de vuelta a Ankara. No importa lo que hagáis, el pueblo kurdo nunca se doblegará ante vosotros, los fideicoisarios, vuestros ataques o vuestras masacres. El pueblo kurdo resistirá contra vuestros ataques como hizo en los 90. Continúan las prácticas ilegales contra la voluntad de la gente kurda. Si no toleráis la voluntad de la gente, ¿para qué celebráis elecciones? La alianza fascista del AKP-MHP es hostil con los kurdos. Resistimos ayer, estamos resistiendo hoy, y seguiremos resistiendo mañana”.

Uca ha remarcado que el régimen turco ha respondido al llamamiento a la paz del líder kurdo con el nombramiento de los fideicomisarios: “Es momento de resistir contra el fascismo y las atrocidades”.