En un comunicado, la Administración Autónoma de Shengal afirmó que el KDP ha convertido las indemnizaciones destinadas a los yazidíes, quienes sufrieron daños durante el régimen de Saddam Hussein, en una herramienta de propaganda electoral.

Se afirmó que el KDP ha estado recopilando tarjetas de votación de la población con la promesa de entregar los pagos compensatorios, describiendo esto como una táctica electoral engañosa destinada a confundir al pueblo.

La administración hizo un llamado a la población para que permanezca vigilante ante dicha manipulación y recuerde el papel que jugó el KDP durante la campaña genocida de 2014.

El KDP se quedó con la mayor parte de la compensación

El comunicado señaló que, de los 25 millones de dinares iraquíes asignados por el Estado iraquí como compensación por los daños sufridos durante la era de Saddam Hussein, solo 10 millones llegarían al pueblo, mientras que el resto ha sido confiscado por el KDP. La Administración Autónoma subrayó que el KDP está utilizando ahora la compensación restante como moneda de cambio electoral, calificando esto de inaceptable.

El KDP no puede representar a la comunidad yazidí

El comunicado enfatizó que el KDP ya no mantiene ningún vínculo legítimo con los yazidíes. “Hacemos un llamado a nuestro pueblo para que no caiga en las maniobras del KDP, para que recuerde su papel durante el genocidio de 2014 y se mantenga consciente de lo que hizo en Shengal a través del Acuerdo del 9 de octubre. Debe saberse que el KDP siempre ha actuado guiado por sus propios intereses y nunca ha dado un paso sin esperar algo a cambio. Por lo tanto, el KDP no puede representar a la comunidad yazidí. Nuestro pueblo, que es consciente de lo que hizo el KDP durante el genocidio, no debe dejarse engañar.”

Promesas falsas

La Administración Autónoma declaró que la afirmación del KDP de que distribuirá compensaciones a los yazidíes en Shengal, cuando ni siquiera puede pagar los salarios de sus propios empleados en medio de la crisis económica actual, no tiene fundamento alguno en la realidad. La administración subrayó que la población no debe creer tales promesas.

El comunicado concluyó con el siguiente llamado: “Nadie debe caer en las trampas del KDP. Si esta compensación ha de pagarse, debe hacerse a través de las instituciones oficiales del Estado iraquí. Este proceso no debe convertirse en una herramienta electoral para explotar a los yazidíes con fines políticos.”