Huelga general en Kurdistán Oriental e Irán entra en su tercer día

La huelga general lanzada en Kurdistán Oriental e Irán ha marcado su tercer día con la participación de muchas y muchos estudiantes universitarios.

La rebelión por la libertad en Kurdistán Oriental e Irán lleva tres meses.

La huelga general, convocada por el movimiento revolucionario en Irán y Kurdistán Oriental (Rojhilat), comenzó hace dos días para protestar por los ataques de las fuerzas del régimen iraní.

La huelga general continúa en Kirmanshan, Sine, Îlam, Mahabad, Rewanser, Pawe, Merîwan, Seqîz, Bane, Bokan, Dîwandere, Qirwe, Kamyaran, Şîno, Dêwlan, Ciwanro, West Islam Abad y muchas otras ciudades de Kurdistán Oriental.

Las tiendas han permanecido cerradas en Shiraz, Bushehr, Kerec, Esfehan, Lahican, Qezwîn y más ciudades de Irán.

Los y las estudiantes universitarios se han sumado a la huelga general y están boicoteando escuelas en muchas ciudades, especialmente en Teherán.

Antecedentes

Para las "protestas del 14-15-16" -los números son las fechas en el mes calendario persa de Azar- se convocó una huelga de comerciantes y un boicot de toda la actividad económica durante tres días. Las tiendas permanecerán cerradas y se evitarán las compras, bloqueando así cualquier circulación de dinero en el sistema bancario iraní. La organización kurda de derechos humanos Hengaw mostró videos de Rojhilat que mostraban calles casi desiertas y mercados, tiendas y bazares cerrados en el centro de las ciudades. En más de veinte ciudades kurdas, comerciantes y dueños de bazares participan en las huelgas. En todo el país, más de 50 ciudades están en huelga.

Llamamientos similares llevaron en las últimas semanas a una intensificación del levantamiento popular que se ha apoderado del país desde la muerte de Jina Mahsa Amini, de 22 años. La mujer kurda fue víctima de un feminicidio estatal bajo custodia policial a mediados de septiembre. La policía moral la había arrestado por presuntamente violar el código de vestimenta del régimen islamista.

Desde el comienzo del levantamiento popular en Irán y Kurdistán Oriental, los grupos de derechos humanos estiman que han muerto cerca de 500 manifestantes, incluidos al menos 64 niños. Además, en los últimos meses han sido detenidas miles de personas, algunas de las cuales ya han sido condenadas a muerte por tribunales revolucionarios por el delito de "guerra contra Dios".