La Comisión Internacional Independiente de Investigación sobre Siria de las Naciones Unidas (ONU) publicó su informe sobre Siria, que abarca el periodo comprendido entre el 1 de enero y el 30 de junio de 2023, en una rueda de prensa celebrada en la Oficina de la ONU en Ginebra. El informe se debatirá en la 53ª Sesión de Derechos Humanos, que comenzó en la Oficina de la ONU en Ginebra el 11 de septiembre y se prolongará hasta el 13 de octubre.

Continúan los crímenes de guerra

El Presidente de la Comisión, Paolo Pinheiro, intervino en la rueda de prensa y señaló que la violencia en Siria se recrudece mientras se agrava la crisis económica: "Antes de que Siria se hunda aún más en una escalada de violencia y en el declive económico, pedimos a los principales actores que cesen los ataques contra la población civil y respondan a sus acuciantes necesidades, e instamos al gobierno de Damasco a que preste atención y responda positivamente a las legítimas aspiraciones y derechos de los sirios como clave para poner fin al conflicto."

Pinheiro añadió: "Elogiamos a los Estados que desde enero han repatriado a más de 2.000 mujeres y niños, y pedimos que continúen estas repatriaciones. También pedimos a los Estados que traigan a casa a los ciudadanos adultos varones detenidos en el noreste de Siria, y que hagan rendir cuentas a los presuntos autores entre ellos de crímenes de guerra, crímenes de lesa humanidad y genocidio en procedimientos que cumplan las normas sobre juicios justos."

Tras los devastadores terremotos de febrero, el informe documentó cómo el gobierno sirio y otras partes (Turquía entre ellas) obstaculizaron innecesariamente la ayuda para salvar vidas y siguieron bombardeando objetivos en la zona afectada por el seísmo.