Los soldados turcos llevaron a cabo dos operaciones contra el vecindario de Bukec (Ashqan) del distrito de Gupinar en Van el pasado 25 de abril y 1 de mayo. Los residentes del vecindario fueron sometidos a insultos durante las operaciones y forzados a permanecer en pie durante horas en la plaza de la población durante la primera de estas operaciones. Los soldados confiscaron entonces parte de sus suministros de comida, tirando el resto al río Nordiz.

Los soldados reclaman suministros de comida de los bunkers

Los soldados, que se desplegaron desde 9 helicópteros Skorsky al vecindario de Bukec el 25 de abril, lo rodearon. Entonces detuvieron a Abdurrahman Dik por medio de una orden pendiente y se le condujo a un antiguo puesto avanzado sin techado donde tuvo que permanecer a la espera durante todo un día.

Los soldados obligaron a que todos los vecinos se mantuvieran en pie y esperaran durante horas a la intemperie pese al frío, mientras llevaban a cabo la operación. Confiscaron sus teléfonos y reunieron sus suministros en mitad de la plaza, afirmando que los habían confiscado de los bunkers. Esta operación duró 36 horas.

Kinya Gencer, quien ha hablado con la Agencia Mesopotamia, ha explicado que los soldados los maldijeron e insultaron: “No pudimos alimentar a nuestros animales en todo el día, desde que amaneció hasta que se puso el sol. Todo lo que reclamaron afirmando que era del PKK pertenecía en realidad a la gente”.

Animales muertos, suministros de comida quemados

En otra operación llevada a cabo ayer, M. Kasim Kocak, de 45 años, y Menav Kocak, de 55, fueron detenidos mediante órdenes de arresto.

Los detenidos permanecen en la comandancia del distrito, mientras Haliya Kocak, otro residente al que tiraron la puerta abajo, ha explicado que los soldados abofetearon a su hijo durante el registro de su domicilio.

Dos corderos de Fevzi Kocak han muerto en el granero en tanto que no le permitieron sacarlos. Kocak ha explicado: “Nuestra población fue allanada. Nos insultaron y tiraron abajo nuestras puertas. Detonaron nuestras botellas de butano. Dispersaron enormes bolsas de azúcar y sal por el suelo”.

Tortura con agua caliente

Los soldados turcos abofetearon a Mehdi Kocak, de 19 años, quien ha explicado que esto ocurrió en su casa cuando le preguntaron por Sabri Kocak y él respondió que no sabía nada. Después le patearon en la cara.

Ferhat Gencer también fue golpeado, recibiendo patadas y puñetazos en cuello y espalda varias veces. Gencer ha explicado que un soldado le vertió un termo lleno de té caliente cuando dijo que no tenía respuestas para las preguntas que le estaba haciendo.

Los soldados también quemaron banderas del HDP y posters de sus copresidentes Pervin Buldan y Sezai Temelli.