El presidente del Comité Internacional de la Cruz Roja, Peter Maurer, hizo un llamamiento a la comunidad internacional para que se una para encontrar un "nuevo enfoque" y soluciones a largo plazo, al concluir una visita de cinco días a Siria.
Maurer visitó Damasco, Darayya, Hasakeh y el campamento de Al Hol durante este viaje.
Hablando de las mujeres y los niños varados en campamentos como el de Al Hol, el Sr. Maurer declaró: "Este es realmente el lugar donde la esperanza se extingue. Es una de las mayores, si no la mayor, crisis de protección infantil a la que nos enfrentamos hoy en día".
"Es un escándalo que la comunidad internacional permita que este lugar continúe, y que esta situación continúe, no por un problema humanitario insuperable, sino por divergencias políticas que impiden encontrar una solución duradera para los que han quedado varados aquí en el noreste de Siria", dijo.
Hizo un llamamiento a la comunidad internacional para que se una para encontrar soluciones prácticas para los nacionales de más de 60 países que se encuentran en el campamento de Hol, entre los que hay decenas de miles de iraquíes y sirios.
De las 62.000 personas que se calcula que hay en el extenso campamento, dos tercios son niños, muchos de ellos huérfanos o separados de sus familias. Crecen en condiciones duras y a menudo peligrosas. El CICR insta a todos los Estados a que asuman la responsabilidad de sus nacionales en Al Hol y en el noreste de Siria y a que hagan todo lo posible para repatriarlos legalmente, respetando la unidad familiar y apoyando plenamente la reintegración.