Mujeres internacionalistas organizaron una marcha en Turín como parte de la campaña «Libertad para Abdullah Öcalan, una solución política a la cuestión kurda» y saludaron así la resistencia del líder popular kurdo Abdullah Öcalan, preso en la isla-prisión turca de Imrali en un régimen de aislamiento agravado al margen de toda legalidad desde 1999.

Varias organizaciones como Rete Jin, Fridays4Future, Verso il Kurdistan y StudentiIndipendenti apoyaron la acción.

Las activistas desplegaron pancartas que llamaban la atención sobre el paradigma democrático, ecológico y de liberación de las mujeres de Abdullah Öcalan así como sobre su antimilitarismo, y fotos de muchas mujeres revolucionarias como Sakine Sansız, Andrea Wolf, la comandante Ramona, Shadia Abu Ghazaleh y Teresa Noce. «Libertad para Öcalan» fue escrito en la plaza Piazza Castello, donde la multitud era densa.

Las declaraciones de las activistas enfatizaron que Abdullah Öcalan es el único líder que defiende la libertad de las mujeres y, por lo tanto, su libertad significa la libertad de todas las mujeres. Afirmaron que «la única fuente de solución a las crisis en Oriente Medio son las ideas y pensamientos del líder Öcalan».

La manifestación saludó al pueblo kurdo que resistió en la manifestación de Amed (Diyarbakır) el 13 de octubre, y terminó con una danza tradicional kurda [govend], actualmente criminalizada en Turquía con penas de cárcel, en piazza Castello.

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