En la conferencia de Hamburgo discuten sobre la conexión entre arte y resistencia

La tercera sesión de la Conferencia de Hamburgo "Queremos que nuestro mundo vuelva" fue sobre la conexión entre el arte y la resistencia. Hoy continúa con talleres descentralizados.

El viernes por la noche, en la tercera sesión en la conferencia de Hamburgo, "Queremos recuperar nuestro mundo" de la serie de eventos "Desafiando la modernidad capitalista", abrió el segundo gran complejo temático, "Resistencia, reapropiación y reconstrucción". En la jornada se trató sobre la declaración de que "La resistencia y el cambio comienzan en el arte". El complejo temático se completará el domingo con una sesión sobre educación. Ayreen Anastas, Rene Gabri y David Neurdenburg formaron parte del panel moderado por Targol Mesbah.

El debate comenzó con una presentación del estudiante de arqueología David Neurdenburg. En la conferencia fue critico con  la arqueología clásica por su metodología y práctica patriarcal, que, dijo, sirve principalmente al sistema capitalista patriarcal para implementar y estabilizar la dominación. Por lo tanto, la arqueología es a menudo sólo una representación de la sucesión de sistemas gobernantes e imperios. Esto legitima al Estado y presenta que el sistema estatal no tiene alternativa, mientras que al mismo tiempo socava los valores sociale,  señaló  Neurdenburg y citó las ciencias arqueológicas del régimen turco, que son un poderoso medio para borrar la identidad kurda.

Refiriéndose a los tratados de Abdullah Öcalan y Murray Bookchin sobre la "civilización democrática" y la "herencia de la libertad", Neurdenburg presentó el papel central de la comprensión de la historia para la libre coexistencia. Explicó el principio de "historia desde abajo" sobre la base de cinco criterios:

"La historia desde abajo explora la vida de los trabajadores con una visión crítica del poder y la resistencia. Se basa en las experiencias de las personas "comunes" y su conciencia y ve como su tarea hacer que las voces de esas mismas personas sean escuchadas para permitir la agencia desde abajo. Sólo la conexión con la propia historia permite una conexión con las propias luchas, porque los gobernantes trataron de "suprimir nuestra existencia de la historia".

En su presentación, tambén informó en detalle sobre el trabajo del comité arqueológico en la Administración Autónoma del Norte y Este de Siria (AANES). Tuvo la oportunidad de entrevistar a los copresidentes del comité en relación con un proyecto de investigación. En sus inicios, la tarea principal del comité era la preservación y protección de sitios históricos y el trabajo de divulgación en las instituciones educativas. Debido a la ocupación de la región por el llamado "Estado Islámico", muchos sitios culturales fueron saqueados y destruidos. Después de la liberación por las Fuerzas Democráticas Sirias (SDF), el alcance de la destrucción se hizo visible. Miles de artefactos habían sido vendidos o destruidos. El comité trabaja en estrecha colaboración con la comunidad local para involucrar e informar a sectores más amplios de la sociedad sobre su patrimonio cultural.

David Neurdenburg terminó su presentación enfatizando la importancia de la historiografía local y la descentralización del conocimiento histórico para desmitificar el estado.  En su conclusión, eligió una cita de Murray Bookchin: "La suposición de que lo que existe hoy siempre ha existido es el ácido que corroe todo pensamiento visionario"

Posteriormente, Ayreen Anastas y René Gabri  dieron una conferencia conjunta sobre una comprensión resistente del arte y su perspectiva sobre la revolución. El carácter clásico de la conferencia se rompió y enriqueció con métodos participativos y descripciones metafóricas. Comenzaron su contribución con historias autobiográficas sobre su acercamiento al arte. René Gabri contó su experiencia de niño en Los Ángeles cuando no podía hablar inglés y se comunicaba con otros niños a través de imágenes. Cuando era adolescente, hizo una película en clase de inglés para expresarse a sí mismo y a su historia. Ayreen Anastas habló sobre un libro que había leído mientras estudiaba arquitectura en Berlín que todavía la inspira hoy.

Las y los oradores explicaron su crítica del concepto de arte en el modernismo capitalista y abordaron la división de roles entre artistas profesionales y espectadores pasivos y la lógica de explotación y poder inmanente en esto. Dijeron que, en su comprensión del arte, no hay artistas, o mejor dicho, todos pueden ser artistas. Entienden el arte como una puerta de entrada a la libertad, como un campo de juego para hacer que otro mundo sea perceptible y comprensible y para probar lo que puede existir más allá del patriarcado, el capitalismo, el racismo y el colonialismo. Así, describen el arte como un "lugar de libertad" y una expresión de la buena vida que todos buscan.

René Gabri leyó entonces un texto que describía la función de la voz como fuerza colectiva de comunidad y como expresión del carácter y la historia comunitarios. Explicó que en cada ser humano, y por lo tanto en cada voz, también hay un reflejo de la agitación entre la vida individualizada e industrializada en las metrópolis y la resistencia en los lugares de autonomía. El texto mira el movimiento "Occupy Wallstreet" como un ejemplo concreto, los lugares de intercambio comunal, conexión y arte en este momento. Describe su experiencia de este movimiento y la fuerza que vino de la colectividad y la reapropiación de esta localidad particularmente capitalista a través de la cultura y el movimiento resistentes. Este mismo espacio, dice, es un lugar para el arte, como una forma de probar cosas y experimentar, de jugar con perspectivas colectivas.

Al final,  a los participantes de la conferencia se les pidió que produjeran un sonido o un ruido durante dos minutos. Esto creó un momento colectivo que permitieron experimentar la unidad y la diversidad al mismo tiempo.

En el debate se plantearon varios puntos de las presentaciones. Por ejemplo, un participante señaló que el arte en la sociedad actual era un privilegio de unos pocos y que a los grupos marginados en particular se les negaba completamente el acceso a esta forma de expresión. Las formas de expresión como la artesanía y el folclore no son percibidas como arte por la sociedad. Además, el arte era a menudo una expresión del individualismo y no buscaba soluciones colectivas.

La ronda de discusión mostró cuán versátil se puede entender el tema del arte y cuánta experiencia aún falta en esta área. El panel terminó con un llamado a continuar intercambiando ideas sobre este tema.

La conferencia continúa hoy con talleres descentralizados. El programa, que se había preparado durante meses, tuvo que ser cambiado debido a la escandalosa cancelación de Audimax por parte de la Universidad de Hamburgo bajo la presión de la Oficina para la Protección de la Constitución. La conferencia continuará el domingo en el Bürgerhaus Wilhelmsburg.