La criminalización de los activistas kurdos por llevar banderas de las YPG/YPJ y fotografías del representante del pueblo kurdo Abdullah Öcalan en solidaridad con la lucha kurda continúa en Baviera.

La policía ha llevado a cabo numerosas investigaciones y procesado a numerosos activistas en la provincia. En esta tesitura, no resulta sorprendente conocer la sentencia del Tribunal de Munich contra Zübeyde Akmeşe, una activista kurda que abrió una fotografía de Öcalan para llamar la atención sobre el aislamiento que el Estado de Turquía le impone.

Akmeşe fue multada por mostrar “símbolos” sin autorización, según la ley sobre manifestaciones, y sentenciada a pagar 15 euros al día hasta un total de 1.200 euros. La activista va a recurrir la sentencia.

Activista kurda: ‘Esta sentencia no me hará abandonar mis ideas’

Akmeşe ha hablando sobre la sentencia con ANF y explicado que fue forzada a abandonar su tierra por la represión del Estado turco, momento en el que se trasladí a Alemania pensando que aquí se defendían los derechos humanos.

“Sin embargo”, ha comentado, “me sorprendió la limitación de mi libertad de expresión. Exijo que Öcalan sea libre para acabar con una guerra que lleva 40 años azotando el Kurdistán. El aislamiento en prisión va en contra de los derechos humanos. Estaba mostrando la fotografía de Öcalan para llamar la atención sobre todo esto. Nunca he hecho nada violento. Sólo llevé la fotografía de un líder que se encuentra encarcelado en una situación muy delicada. Esta decisión del tribunal no me hará abandonar mis ideas. Como antes, seguiré gritando consignas a favor de la paz y el diálogo”.

Otros casos

Nico Schreiber, jefe de la Juventud Socialista Alemana-Die Falken, será juzgado el 27 de mayo en un tribunal de la ciudad de Baviera en Nuremberg. Será juzgado tras una investigación por llevar una bandera de las YPG para protestar contra la invasión de Afrin por parte del Estado turco.

En Alemania, el Ministerio del Interior ordenó la prohibición de todas las fotos de Öcalan y símbolos de las fuerzas del Kurdistán occidental. El ministerio afirmó que llevar estos símbolos equivale a hacer propaganda del PKK y Bavaria ha seguido estrictamente la prohibición.

En el pasado mes de marzo, el conocido activista por la paz alemán Munich Schreer fue castigado por desplegar una bandera de las YPJ y llevar un cartel con la fotografía de Öcalan. Claus Schreer fue condenado a pagar un total de 2.800 euros y afirmó: “Seguiré gritando libertad para Öcalan”.