El 3 de agosto de 2014, muchas aldeas y distritos de la ciudad yazidí de Shengal, en el sur de Kurdistán (norte de Irak), fueron masacrados por el ISIS. Las personas del pueblo yazidí que murieron en el ataque fueron enterradas en fosas comunes. De las 87 fosas comunes ubicadas en Shengal desde entonces, 34 se han abierto hasta ahora.

A medida que se avecina el aniversario de la masacre contra el pueblo yazidi, el destino de los desaparecidos durante la masacre se ha vuelto a poner en la agenda una vez más. El gobierno iraquí está abriendo actualmente las fosas comunes donde están enterrados los asesinados durante la masacre.

La exhumación de los restos de las víctimas en 6 fosas comunes ha comenzado en el pueblo de Qinde, ubicado en el sureste de Shengal. Según testigos, cerca de 100 personas están enterradas en las fosas comunes.

Cientos de personas con fotografías de las víctimas se concentraron en la zona de las fosas comunes. Una delegación de la Administración Autónoma de Shengal también estuvo presente en el pueblo de Qinê, donde se abrieron las fosas comunes.

Los cuerpos que serán exhumados serán enviados a Bagdad para pruebas de ADN. Los restos de las víctimas serán luego entregados a sus familias una vez que se aclare su información de identidad después de las pruebas de ADN.

Se informa que el trabajo en las fosas comunes durará unos días.