Los mercenarios del ISIS lanzaron sus ataques genocidas contra Shengal el 3 de agosto de 2014. El dolor causado por esos ataques a la comunidad yazidí de Shengal aún no ha remitido. Miles de kurdos y kurdas yazidíes fueron masacrados. Miles de niños y mujeres fueron secuestrados. Cientos de miles de yazidíes huyeron de los ataques y se refugiaron en el monte Shengal.

Muchos, después, se refugiaron en Rojava y el Kurdistán Sur (también conocido como “Bashur”, región del Kurdistán iraquí). Miles de yazidíes siguen viviendo en campamentos. La masacre se cometió contra los yazidíes ante los ojos del mundo entero y, finalmente, algunos Estados e instituciones internacionales reconocieron este ataque como genocidio. Sin embargo, el gobierno iraquí no lo reconoció como genocidio y ni siquiera lo incluyó en la agenda parlamentaria.

Reconocer el genocidio

El concejal del municipio de Zorava, Dilşad Biro, ha declarado: "Nuestra sociedad necesita organización y alianza más que pan y agua. El gobierno iraquí no ha reconocido hasta ahora el 3 de agosto de 2014 como genocidio. ¿Qué podemos esperar de un gobierno así? Aunque nuestras creencias sean diferentes, somos ciudadanos de este lugar".

El KDP crea obstáculos para el regreso a casa de los yazidíes.

Dilşad Biro ha denunciado que el KDP estaba haciendo juegos sucios para impedir el gobierno autónomo de Shengal. "Algunos de nuestros yazidíes se vendieron a algunos partidos a cambio de dinero. El gobierno de Bashur atrajo a un gran número de jefes y de círculos religiosos yazidíes. Estas personas se erigen en obstáculos para la reconstrucción de Shengal. El KDP crea obstáculos para el regreso a casa de los yazidíes. Nuestra gente que vive en los campamentos no debe escuchar sus mentiras. En el momento del ataque, el KDP dejó sola a la comunidad yazidí. 25 mil personas quedaron indefensas ante los ataques del ISIS. Ni defendieron ni dieron armas para que la gente se defendiera. Atacaron al pueblo de Zorava y mataron a tres miembros de nuestra asociación".

Hoy somos más fuertes.

Biro ha afirmado que han llegado a una posición más fuerte en términos de política militar y organizativa, y ha añadido: "Ahora no necesitamos a nadie en términos militares y de gobierno autónomo. Tenemos fuerza militar. Las YBŞ, YJŞ y Asayish nos defienden. Dormimos tranquilos y tranquilas porque confiamos en nuestras fuerzas. Después de hoy, nadie debería decir que la sociedad yazidí está indefensa. Hoy somos más fuertes".

Ayuda destinada a Shengal en los bolsillos del KDP

El portavoz de la Asociación Dihola, Îdo Resho, ha señalado que el gobierno iraquí es cómplice del genocidio porque ni siquiera ha podido procesar a un solo mercenario del ISIS: "Aunque han pasado 9 años, el gobierno iraquí no ha dado un paso hacia Shengal. En una situación así, ¿cómo iban a llevar ante los tribunales y juzgar a un mercenario cubierto de sangre yazidí? Muchos países y organizaciones internacionales aceptaron la masacre de Shengal como genocidio y apoyaron a los yazidíes. También se proporcionó ayuda económica para apoyar los esfuerzos de reconstrucción de los yazidíes. Pero el KDP y el gobierno del Kurdistán Sur gastaron este dinero y no permitieron que llegara a nuestra sociedad."

Shengal es el Damasco de los yazidíes.

Resho ha continuado: "Shengal es un lugar de existencia y no existencia. Si no existiera Shengal, nosotros y nosotras no existiríamos. Nuestros mayores siempre decían que Shengal es el Damasco de los yazidíes. En consecuencia, resistiremos. Nos defenderemos y triunfaremos con nuestras propias fuerzas".