El ejército turco taló árboles en un terreno forestal en el campo de la aldea de Riz, en el distrito Genç de Bingöl, para construir un Kalekol (puesto avanzado fortificado). La zona, donde ya comenzaron las obras de construcción de la carretera, fue vallada con alambre y será iluminada.

La población local, que ha regresado a sus pueblos que fueron evacuados e incendiados en los tristemente célebres años 90, está preocupada.

En declaraciones a la agencia Mezopotamya, los aldeanos relataron: “Nosotros también somos ciudadanos de este país. No hicimos daño a nadie. Vivimos aquí y necesitamos pastorear nuestras ovejas y nuestro ganado vacuno, que por la noche se dispersan por todos lados y es necesario reunirlos. Se nos dice que no traigamos nuestro ganado y lo apacentemos allí. ¿Cómo podemos vivir en estas circunstancias?".