El estado turco invasor, que ha estado llevando a cabo ataques contra las regiones de Avashin, Zap y Metina de las Zonas de Defensa de Medya en Kurdistán del Sur controladas por la guerrilla desde el 17 de abril de 2022, también ha intensificado su actividad militar en la región fronteriza.

Están llegando informes de una intensificación de la actividad militar en la provincia de Hakkari en los últimos días.

Fuentes locales informan de un despliegue militar diario en la zona fronteriza desde los distritos de Yüksekova, Şemdinli y Derecik.

Según los informes, se está transportando una gran cantidad de tropas a la frontera de Çukurca desde los puestos militares en la provincia de Van. Estos soldados están estacionados en las bases militares construidas en los pueblos fronterizos de Serê Sevê, Ertuş y Bilêcan.

Por otro lado, están llegando informes de transporte de equipo militar en camiones a la región fronteriza.

Según los informes, los llamados guardias de las aldeas de la región recibieron instrucciones para una operación militar como parte de los preparativos para un ataque de ocupación inminente por parte del ejército turco.

Los guardias de las aldeas son unidades paramilitares utilizadas en Kurdistán contra las guerrillas y los miembros de la oposición no deseados. Se componen en gran medida de líderes tribales, grandes terratenientes, familias e individuos que a menudo han trabajado con el estado durante décadas en un intento de defender los intereses del estado en Kurdistán. Algunos de los guardias del pueblo se unen a este sistema voluntariamente, mientras que otros son amenazados con asesinato, arresto y expulsión y se convierten en guardias del pueblo bajo presión. Los regimientos de Hamidiye en el Imperio Otomano se consideran el modelo histórico de los Village Guards. El actual sistema de guardias de aldea surgió en 1985, un año después de que el Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) iniciara su lucha armada. En ese tiempo, el gobierno turco bajo Turgut Özal comenzó a reclutar y armar tribus y clanes kurdos en la guerra contra el PKK. Miles de aldeas kurdas que rechazaron el sistema de vigilancia de aldeas fueron quemadas y arrasadas por el estado en la década de 1990.