El Consejo Ejecutivo del Consejo Nacional del Kurdistán (KNK) ha emitido una declaración sobre la reunión extraordinaria que celebraron el 12 de diciembre para debatir la situación en Kurdistán del Sur (Bashur), donde continúan las protestas contra la crisis económica.
En la declaración se señalan las crecientes protestas en todo el Kurdistán del Sur y se decía: "El hecho de que no se hayan resuelto los problemas existentes durante años ha llevado la situación en Bashur a un nivel alarmante".
Destacando el descontento y la ira del público que se extiende por las calles, el KNK dijo: "A nuestro pesar, los últimos incidentes han sido testigos de violencia y métodos no deseados. Algunos ciudadanos resultaron heridos y otros perdieron la vida".
Extendiendo sus condolencias por los ciudadanos asesinados, el KNK pidió la liberación de todos los detenidos durante las manifestaciones.
"Apoyamos las demandas legítimas de los manifestantes para lograr el derecho a la subsistencia, el servicio, la libertad, una vida contemporánea y honorable. Esperamos que estos derechos fundamentales puedan ser alcanzados de una manera democrática y pacífica."
KNK señaló que la experiencia demuestra que la inobservancia y la represión brutal de las demandas de la gente nunca darán solución a los problemas. El Congreso subrayó que sólo la paz y el diálogo podrían allanar el camino para una solución.
Haciendo un llamamiento al gobierno de Kurdistán del Sur para desarrollar una resolución pacífica y democrática, KNK añadió: "También pedimos a las fuerzas de seguridad que dejen de usar las armas contra los manifestantes".