El 20 de julio se inició una vigilia en el campo de refugiados de Martyr Rustem en Makhmur para exigir el fin del aislamiento impuesto al líder del pueblo kurdo Abdullah Öcalan y para exigir su libertad física.

La vigilia ha dejado atrás un mes y continúa con la participación de más personas cada día.

La preocupación por la situación de Öcalan aumentó después de que el miembro del Consejo Ejecutivo de la Unión de Comunidades Democráticas del Kurdistán (KCK), Sabri Ok, dijera en una entrevista en el canal de televisión kurdo Sterk TV el 8 de julio que recientemente se habían enviado cartas amenazadoras a Abdullah Öcalan de forma anónima a través de la administración de la prisión de Imrali.

Los abogados solicitan reunirse con el líder del pueblo kurdo Abdullah Öcalan dos veces por semana. Sin embargo, las solicitudes de visita quedan sistemáticamente sin respuesta. En algunos casos, meses después, se informa a los abogados de que se han tomado medidas disciplinarias contra el líder del pueblo kurdo y, por tanto, no se puede conceder ninguna visita.

En una declaración del 2 de mayo de 2023, el bufete de abogados Asrın dijo: "No tenemos noticias de Öcalan desde el 25 de marzo de 2021. A pesar de todas las peticiones y esfuerzos de sus abogados y familiares, desconocemos las condiciones de vida y el estado de salud de Öcalan y nuestros tres clientes en Imrali. Esta situación nos preocupa a nosotros y a toda la sociedad".