Hubo dos fuerzas de resistencia en Shengal durante la guerra librada contra los mercenarios del ISIS entre 2014 y 2015. Las guerrillas de las HPG y de las YJA Star y los combatientes de las YJŞ y las YBŞ, que formaron la primera fuerza yazidí que luchaba por defender su propia existencia. La segunda fuerza en el campo de batalla estaba formada por las madres de Shengal que apoyaban a los combatientes. Nûrê Şengal es una de esas madres.
Nûre Şengal, miembro de la Asamblea Popular de Xanasor, que luchó codo con codo con los guerrilleros y las guerrilleras en Shengal, ha contado a ANF lo que ocurrió aquellos días.
Şengal ha dicho que durante el ataque de los mercenarios del ISIS en 2014, todo el mundo intentaba ir al Kurdistán del Sur para evitar caer en manos del ISIS: “Estábamos en nuestros jardines en Rabia cuando comenzó el ataque del ISIS. Oímos disparos a primera hora de la mañana. Cogimos a los niños y a las niñas y, junto con varias familias, nos fuimos al Kurdistán del Sur. Caminamos durante un día. Nos alojamos en campamentos del sur. Mi marido no podía quedarse en otro sitio que no fuera Shengal. Así que volvió a Shengal y luchó con la guerrilla. Yo volví a Shengal en cuanto se despejó la carretera. Nuestras tierras son mucho mejores que las extranjeras, en cualquier circunstancia”.
‘Una tienda de campaña en mi propia tierra era como un castillo para mí’
Y ha continuado: “Cuando volvimos, la guerra aún seguía. Así que nos fuimos a las colinas. La guerrilla construyó una tienda para nosotros. En ese momento, me sentí muy aliviada. Como estaba en mi propia tierra, la tienda era como un castillo para mí. El ISIS todavía existía en algunas aldeas en aquella época. Los guerrilleros y las guerrilleras nos ayudaron mucho. Después de conocerles, comprendimos cuál era el camino correcto. Así conocimos las ideas de Rêber Apo [Abdullah Öcalan]”.
‘La guerrilla nos enseñó a ser fuertes’
Hacia finales de 2015, los grupos del ISIS fueron derrotadas por las HPG y las YJA Star.
Nûrê Shengal, que fue testigo de la liberación de Shengal, también ha descrito sus sentimientos sobre esos días: “Por un lado, la guerrilla luchaba y, por otro, nosotros le preparábamos la comida. Las madres se reunían, cocinaban en grandes ollas sobre el fuego y enviaban la comida a los puestos de la guerrilla. La guerra era muy difícil, pero cuando estábamos cerca de nuestros combatientes, nuestra moral era buena y recuerdo esos momentos como un tiempo muy precioso. Estábamos muy contentos, porque sabíamos que la libertad no estaba lejos. Había momentos en los que estábamos cansados, pero cuando veíamos a nuestros combatientes, no había rastro de ese cansancio. Estos combatientes dieron su vida por nosotros, derramaron su sangre, y dijimos que haríamos todo lo posible por ellos”.
Y ha añadido: “Antes teníamos mucho miedo, pero gracias a los guerrilleros y las guerrilleras kurdas lo superamos. Nos enseñaron a ser fuertes. Como madres, tomamos una decisión en ese momento. Resistiríamos, si era necesario, conseguiríamos armas y nos defenderíamos. Los guerrilleros y las guerrilleras nos animaron. Mi hija se unió a las YJŞ en ese momento. Mucha gente me dijo que mi hija era pequeña, pero yo dije: ‘Que aprenda a protegerse para que no sufra otro genocidio cuando crezca y pueda defenderse’. Estábamos en las montañas cuando se liberó Shengal. Los guerrilleros y las guerrilleras vinieron y nos informaron de que Shengal había sido liberada. Estábamos muy contentos, organizamos un evento especial”.
‘Shengal será más bonita si todos los yazidíes vuelven a su tierra’
Finalizando su declaración, Nûrê Şengal ha hecho un llamamiento a los yazidíes de fuera de Shengal para que vuelvan a sus tierras: “Shengal es más bonito que antes. Tras la liberación de nuestras tierras, se estableció la Administración Autónoma. Construimos nuestras asambleas e instituciones. Yo también ocupé mi lugar en el trabajo de la Asamblea. Y Shengal sería aún más bonita si todos los yazidíes volvieran a sus tierras”.
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