Los revolucionarios kurdos Şirin Elemhuli, Ferzad Kemanger, Ferhad Wekili, Eli Heyderyan y Mehdi İslamyan fueron ejecutados por el régimen iraní en la prisión de Evin en Teherán el 9 de mayo de 2010.
El Partido de la Vida Libre del Kurdistán (PJAK) publicó una declaración en la que rinde homenaje a los revolucionarios kurdos que -dijo- tienen sus nombres escritos en páginas de oro en la historia de la lucha del Kurdistán del Este.
El PJAK prometió seguir los pasos de los "Mártires de Sêdar", a quienes definió como el símbolo de la lucha sagrada del pueblo kurdo y de la lucha abnegada de las fuerzas guerrilleras.
"Ferzad Kemanger y sus compañeros mostraron al pueblo iraní y del Kurdistán del Este el camino de la resistencia contra la región iraní. La incomparable resistencia de Şirin Elemhuli, que libró una lucha abnegada contra el sistema misógino iraní, se convirtió en un faro de luz para todos los presos por la libertad. Ellos dieron testimonio de que rendirse al fascismo equivale a la muerte. La gran lucha actual contra la legitimidad del régimen iraní tiene su origen en el camino de los mártires del 9 de mayo.
Kemanger y sus compañeros hicieron de mayo el mes de los derechos, las libertades y las luchas, y la base de una vida libre. Lucharon por la libertad de su pueblo a costa de su vida. Con su lucha, transformaron las cárceles de lugares de muerte en campos de resistencia.
Llamamos a todos los defensores de la libertad a potenciar la lucha por la libertad y a elegir el camino de la liberación del pueblo. Reiteramos nuestra promesa de luchar hasta que se cumplan las exigencias de nuestros mártires".