Anuncian la creación del Consejo de Ecología de Amed: “Un terreno común para la lucha”

El Consejo de Ecología Amed aboga por la construcción de estructuras sociales democráticas, ecológicas y libertarias de las mujeres para superar la crisis entre la sociedad y la naturaleza.

Ecología

Ecologistas, agricultores, estudiantes, periodistas, representantes de partidos políticos y organizaciones de la sociedad civil se reunieron en Amed para anunciar la creación del Consejo Ecológico de Amed.

A la reunión, celebrada en la Sala de Conferencias Tahir Elçi del Colegio de Abogados de Diyarbakır, asistieron numerosas organizaciones y personas comprometidas con las luchas medioambientales. En la sala de reuniones se colgó una pancarta en la que se leía "Bê jiyana ekojîk aşitî pêk nayê" (No puede haber paz sin vida ecológica).

En la apertura de la reunión, Necdet Sezgin, miembro de la Asociación de Ecología de Amed, explicó las razones para establecer el consejo, diciendo: "En este período de destrucción ecológica, es urgente crear un terreno común para la lucha".

Tras un momento de silencio y la elección del presidente del consejo, el ecologista Yıldırım Arslan habló sobre los objetivos y principios operativos del consejo y dijo: "Estamos experimentando un proceso que conducirá a un renacimiento en Oriente Medio. Ya no basta con dedicarse a esfuerzos teóricos; Es el momento de unir estos esfuerzos con la sociedad".

En la carta leída por Semra Dağdelen, activista de la Asociación de Ecología, se definió la filosofía fundamental del Consejo con el énfasis de que "la conciencia ecológica es una conciencia ideológica fundamental". El texto incluía análisis exhaustivos de la relación entre los seres humanos y la naturaleza, comunidades socialmente estructuradas dirigidas por mujeres, una visión de una sociedad sin clases y una vida simbiótica con la naturaleza.

Según la carta, la destrucción ecológica y social causada por el sistema civilizatorio jerárquico y opresivo no se limita a las crisis ambientales visibles; La relación entre la sociedad y la naturaleza se ha convertido en un abismo. El Consejo de Ecología de Amed aboga por la construcción de estructuras sociales democráticas, ecológicas y libertarias de mujeres para superar esta crisis.

El texto afirmaba que la naturaleza ha sido gravemente dañada en la región mesopotámica debido a diversos factores, como las presas y las centrales hidroeléctricas construidas en las cuencas de los ríos Tigris y Éufrates, la minería incontrolada, las actividades de energía petrolera y geotérmica, la agricultura dependiente de los productos químicos y la pérdida de diversidad biológica. Hizo hincapié en que toda esta destrucción también ha llevado a un alejamiento de los valores culturales y morales de los pueblos.

La carta establecía que las políticas ambientales por sí solas no serán suficientes para lograr un nuevo modelo de sociedad conocido como la "Tercera Naturaleza"; También son necesarios cambios radicales en la mentalidad y en la sociedad. En el marco del paradigma de la ecología social, se aboga por una política revolucionaria contra la jerarquía y la dominación, y la solución debe comenzar en las comunidades locales y crecer uniéndose a los movimientos de libertad universales, agregó.

El texto afirmaba que una sociedad ecológica sólo puede construirse sobre la base de la democracia directa y la gobernanza local libertaria, y anunciaba que el Consejo Ecologista de Amed había dado el primer paso hacia este objetivo. Con el énfasis de que "la comuna es una escuela donde el individuo se libera", se declaró el objetivo de transformar Amed en una ciudad ecológica y democrática.

Al final del encuentro, se realizó la proyección de una película sobre la lucha ecológica. Después de la sesión a puerta cerrada, se compartirá con el público la declaración final del Consejo de Ecología de Amed.