El Grupo de Solidaridad con los Medios de Comunicación, el Consejo de Prensa, la Asociación de Periodistas Contemporáneos, la Asociación de Periodistas de Diplomacia, la Asociación de Periodistas de Economía, la Asociación de Periodistas Haber-Sen, la Asociación de Periodistas de Esmirna, la Asociación de Periodistas del Parlamento, la Asociación de Reporteros Gráficos de Turquía, el Sindicato de Periodistas de Turquía y los Camarógrafos de Noticias de Turquía han publicado una declaración conjunta por escrito sobre las sucias relaciones expuestas de muchos “periodistas” en los medios de comunicación turcos.
La declaración conjunta publicada el miércoles dice lo siguiente:
“Tras las acusaciones del líder criminal Sedat Peker, se han puesto al descubierto las sucias relaciones de muchos pseudoperiodistas. Hagamos rendir cuentas a quienes explotan el periodismo para sus sucios intereses.
Estamos atravesando un periodo muy oscuro e históricamente importante para el periodismo. Los pseudoperiodistas también han participado en la corrupción que implica a la mafia, la política y los empresarios. Han establecido relaciones estrechas con la política, empresarios y gente al margen de la ley, han recibido regalos-vacaciones caros y se han hecho con posesiones que no pueden obtenerse con el salario de un periodista, y han cambiado sus estilos de vida. Además, se ha revelado que los pseudoperiodistas han estado implicados en sobornos, tráfico de influencias y relaciones ilegales.
El poder judicial tiene que ocuparse de estas graves acusaciones mediante una investigación exhaustiva. Y el Parlamento turco debería crear además una comisión para investigar estas acusaciones. Los llamados periodistas, a los que algunos jefes de los medios de comunicación contratan para establecer relaciones con el gobierno y estar cerca de ministros y burócratas, difaman nuestra profesión. Los jefes de los medios de comunicación deben dejar de ser cómplices de este delito. Como organizaciones profesionales de la prensa, les instamos a explicar lo que saben sobre la corrupción. Nuestra historia está llena de colegas que no dudaron en morir por el honor del periodismo. Promovieron el periodismo por el interés público. Por lo tanto, es también un deber de toda la sociedad mantener vivo su legado”.