El Movimiento de Mujeres Libres Yezidíes (TAJÊ) denunció que las yezidíes que vivían en Afrin fueron secuestradas por los mercenarios que invadieron la ciudad y vendidas, como sucedió en en Shengal cuando estuvo controlado por el Estado Islámico (ISIS).

El TAJÊ alertó que el pueblo yezidí del norte de Siria no sólo es víctima de la agresión física sino que el actual ataque tiene como objetivo a destruirlo culturalmente.

En una declaración difundida hoy, el movimiento de mujeres también reveló que el ejército turco y los grupos terroristas llevan por la fuerza a los yezidíes a las mezquitas para convertirlos al Islam.

“Todos los pueblos de Medio Oriente que defendieron su propia existencia y protegieron sus culturas en el siglo XXI han sido blanco del poder gobernante”, advirtieron en el comunicado.

Para el TAJÊ, “los poderes gobernantes están llevando a cabo repetidas políticas de genocidio contra el pueblo yezidí, la cultura más antigua de Mesopotamia y, de alguna manera, la esencia misma de la cultura kurda”.

“Estos ataques contra la sociedad yezidí no son solo físicos. También tienen que ver con la destrucción de su patrimonio cultural, lugares históricos y sagrados, así como las creencias, ideas y el espíritu yezidíes”, remarcaron en la declaración.

El TAJÊ apuntó que en Medio Oriente existen poder bárbaros que dicen actuar en nombre del Islam para dominar la región e “implementar sus políticas asesinas”. Además recordaron “esta política está bien documentada por lo que sucedió en Shengal” y ahora “ahora les gustaría implementarlas en Afrin”.

Como ejemplo de lo que está ocurriendo en Afrin, el TAJÊ señaló que en esa ciudad kurda los “lugares sagrados fueron quemados por los fascistas, quienes los saquearon”, con el objetivo de “destruir la conciencia histórica de la sociedad”.

El ejército turco y los terroristas aliados “han evacuado 22 aldeas donde vivía la comunidad yezidí y trajeron gente árabe y turcomana para reemplazar a los ciudadanos. Estas personas no pertenecen allí, pero el régimen quiere cambiar la demografía de Afrin. Sin embargo, a pesar de este ataque fascista, algunos miembros de la comunidad yezidí, atados a su tierra, no abandonaron sus aldeas”, expresaron.

A su vez, manifestaron que “tal como lo hizo el Estado turco y sus aliados mercenarios en Shengal, han secuestrado y vendido mujeres yezidíes”.

“A lo largo de la historia, la cultura, las creencias y el pensamiento de los yezidíes han estado expuestos a este tipo de ataques. Dentro de la sociedad yezidí, las mujeres son un objetivo privilegiado. Y esto es porque quieren destruir a las mujeres yezidíes, que son las protectoras de la cultura y la vida”.

Por último, el TAJÊ hizo un llamado a la unidad para defender al pueblo yezidí que vive en Afrin: “Unámonos para exponer las mentiras y las políticas represivas llevadas a cabo en nombre de la seguridad. Llevemos a cabo una lucha unida contra el fascismo del Estado dominante. Todas las mujeres que luchan por la libertad deben derrotar los ataques contra las yezidíes. Participemos de la resistencia en Afrin y luchemos hasta la victoria”