En el contexto del creciente feminicidio y la violencia patriarcal, un grupo de estudiantes en Izmir está preparando talleres de autodefensa.

Mujeres y LGBTI + de todas las edades

El primer entrenamiento de autodefensa de un grupo de estudiantes de Izmir tendrá lugar el 2 de junio. Dentro de un mes, 50 personas ya se han inscrito para un taller de cinco días. Los participantes son mujeres y personas de la comunidad LGBTI + de todas las edades. El seminario cuenta con el apoyo de estudiantes mujeres de Estambul. La agencia de noticias Mezopotamya entrevistó a Izel Graca del grupo preparatorio sobre la importancia del seminario.

La legítima defensa es un derecho fundamental

"La autodefensa es un derecho fundamental", enfatiza Graca, advirtiendo que las mujeres y LGBTI + están amenazadas en todas partes y tienen que luchar por sus vidas. Por lo tanto, los participantes deben recibir formación en defensa propia en un entorno seguro. "Por eso nos unimos", explica y agrega: "Las mujeres que se inscriben quieren protegerse. Nos enfrentamos a la violencia en todas partes. Queremos crear un empoderamiento contra eso".

El empoderamiento como foco

Graca ve una relación dialéctica entre la autodefensa física y la mental: "Es por eso que no miramos la autodefensa solo desde el nivel físico. Saber cómo atacar cuando alguien nos acosa o intenta violarnos nos fortalece mentalmente y nos da seguridad. Por lo tanto, los niveles mental y físico se complementan".

Imperativo de autodefensa

Graca explica que el miedo que vivió de joven la deformó y ante esta intimidación, cada zona debe transformarse en un campo de batalla: "El destino de las mujeres en Turquía está escrito con miedo. No queremos vivir en él nunca más. No queremos que nuestro corazón lata cuando caminamos por la calle por la noche. Creemos que la autodefensa es tan necesaria como el pan y el agua. Se trata de vencer el miedo".