El pasado 20 de marzo, 14 mujeres que habían iniciado una huelga de hambre en solidaridad con Leyla Güven y el resto de activistas en huelga de hambre demandando el fin del régimen de aislamiento del representante del pueblo kurdo Abdullah Öcalan, fueron detenidas en Yenişehir, en Amed.
11 de las 14 mujeres detenidas han sido sentenciadas a arresto domiciliario y a llevar esposas electrónicas. Sevim Coşkun, copresidenta del HDP en el distrito de Sur y una de las mujeres obligadas a llevar esposas electrónicas, ha dicho que es la primera vez que esta medida se aplica a mujeres en Amed.
Apuntando que el Estado está recurriendo a esta medida para vaciar un poco las cárceles turcas, Coşkun ha añadido que es también un modo que el Estado utiliza para atacar a las mujeres que están al frente de la lucha.
Coşkun fue detenida el 20 de marzo por apoyar la huelga de hambre: “Fuimos detenidas durante 5 días. Entonces, fuimos forzadas a llevar esposas electrónicas por sentencia de un tribunal y a permanecer bajo arresto domiciliario. El Estado está tratando de romper a las mujeres, no sólo a las mujeres del HDP sino a todas las mujeres que luchan”.
Coşkun ha finalizado sus declaraciones diciendo: “Nunca daremos un paso atrás en la causa de nuestro pueblo contra la represión del Estado. Porque Leyla Güven tiene razón y estamos de su lado. El aislamiento es un crimen contra la humanidad. Es necesario acabar con el aislamiento impuesto al Sr. Öcalan. Hago un llamamiento público para apoyar y dar voz a Leyla Güven y las presas”.