El desplazamiento forzado y la migración están incrementando por todo el mundo a causa de la guerra y el hambre además de razones sociales y económicas.

A finales de 2017 se estimaba que unos 68.5 millones de refugiados se habrían visto obligados a huir de sus países, según cifras de la ONU. Eso supone unos 3 millones de personas más que en el año 2016.

Siria continúa siendo el principal contribuyente al incremento de refugiados: a finales de 2017 hubo unos 12.6 millones de ciudadanos sirios desplazados. De los 12.6 millones de desplazados 6.3 eran refugiados, 6.2 millones desplazados internos y 146.700 solicitantes de asilo.

En Turquía hay al menos 3.424.200 refugiados según estimaciones de la ONU.

Las mujeres suponen la mitad de la población refugiada. Pero a menudo experimentan una serie de peligros adicionales debidos a su género. Entre esa serie de peligros adicionales están las agresiones sexuales, problemas sociales y psicológicos.

Los principales asuntos son la discriminación sexual, el acoso sexual, la persecución discriminatoria, prácticas perjudiciales basadas en ‘tradiciones’, violencia sexual y violencia en el ámbito familiar.

Las mujeres migrantes a menudo han sufrido acoso incluso antes de huir de sus casas. A menudo han sido acosadas por las fuerzas del régimen, han sufrido torturas sexuales, violaciones y embarazos no-deseados, han sido secuestradas  y han sido objeto de tráfico de personas.

Pero esta violencia contra las mujeres también ha tenido lugar en el país de asilo. La violencia sexual y el acoso han sido perpetrados contra las mujeres mientras esperaban la resolución de su status legal en el país de acogida.

Las mujeres, que tienen que enfrentarse solas a esta violencia, se encuentra muchas veces aisladas en las organizaciones nacionales e internacionales.

Status de mujeres refugiadas

Según  los datos de la encuesta denominada “Condiciones de Salud de los refugiados” llevada a cabo por el Ministerio de Sanidad de Turquía y la Organización Mundial de la Salud sobre la situación de los refugiados en el 2016 se ha podido observar que:

- 18.4 % de mujeres sirias refugiadas nunca han recibido educación.

- 16.1% de las mujeres abandonaron la escuela primaria y solo el 33% se graduó de la escuela primaria.

- 8.4 % de las mujeres refugiadas sirias no se habían casado nunca, el 7% estaban divorciadas y el 9% habían perdido a su marido en la guerra.

- 84.4 % de las mujeres refugiadas sirias trabajaban en el hogar.

- 4.9% eran asalariadas y el 3.5% estaban desempleadas.

De las 300 mujeres que participaron en la encuesta, el 81.3% se casaron siendo menores de 25 años. El 42.7% de las mujeres tenían 5 o más hijos y el 11.3% habían elegido una interrupción voluntaria del embarazo.

En 2016 se produjeron 184.390 nacimientos por parte de mujeres sirias en Turquía.