A pesar de la virulencia de los ataques, Karimi declaró que nadie perdió la vida a consecuencia de estos ataques.
Por otro lado, la ola de ataques provocó nuevas protestas en el país la semana pasada. Los médicos se refieren a los ataques a las estudiantes como "envenenamiento por gas".
Las autoridades afirman que los ataques fueron planeados, especialmente porque las escuelas atacadas son de niñas. Las familias están enfadadas y reaccionan ante la falta de acción de las autoridades.
El Ministerio del Interior anunció que hasta ahora se ha detenido a unos 100 sospechosos.
Los atentados han tenido lugar en 25 de las 31 regiones iraníes. Cientos de escuelas fueron blanco de los ataques. Los opositores creen que el Estado iraní está detrás de estos ataques.