El líder del pueblo kurdo, Abdullah Öcalan, encarcelado en la Prisión de Tipo F de Alta Seguridad en Imrali desde 1999, no ha podido ver a sus abogados desde el 27 de julio de 2011 y a su familia desde el 11 de septiembre de 2016.

Desde esa fecha, el Tribunal de Bursa Nº1, ha citado el Estado de Emergencia declarado en el país como justificación para impedir cualquier comunicación y la suspensión de sus derechos fundamentales.

La copresidenta del DTK y diputada del HDP, Leyla Güven, empezó una huelga de hambre el 7 de noviembre para exigir el fin inmediato del régimen de aislamiento de Öcalan.

La huelga de hambre de Güven ha generado la extensión de gran cantidad de huelgas de hambre que se suceden en las prisiones de Turquía y Kurdistán así como por toda Europa; todas con la misma reivindicación. El lema de las protestas es “La reivindicación de Leyla, es también la nuestra”.

Como parte de las protestas, la juventud kurda ha organizado una acción de desobediencia civil en el aeropuerto de Marsella para llamar la atención a las huelgas de hambre.

En los discursos realizados durante la acción los jóvenes kurdos han hecho un llamamiento a todos las personas patriotas y democráticas para que insistan en la resistencia para acabar con el fascismo.