Al menos 326 personas, entre ellas 43 menores, han muerto ya en las protestas de Irán

Al menos 326 personas, entre ellas 43 menores, han muerto hasta ahora a manos de las fuerzas de seguridad en las protestas de todo el país. De los 43 menores, nueve eran niñas y tres eran de nacionalidad afgana.

Según la información obtenida por la ONG, Derechos Humanos de Irán, al menos 326 personas, entre ellas 43 menores, han muerto hasta ahora a manos de las fuerzas de seguridad en las protestas de todo el país.

De los 43 menores, nueve eran niñas y tres eran de nacionalidad afgana.  Derechos Humanos de Irán está trabajando para obtener la confirmación de sus edades.

Número de muertos por provincia

Las y los manifestantes han sido asesinados en 22 provincias, y el mayor número de ellos se ha registrado en Sistán y Baluchistán, Teherán, Mazandarán, Kurdistán y Gilán, respectivamente.

Se han registrado muertes en 22 provincias: Sistán y Baluchistán: 123 personas; Teherán: 33 personas; Mazandaran: 33 personas; Kurdistán: 27 personas; Gilan: 22 personas; Azerbaiyán Occidental: 22 personas; Kermanshah: 13 personas; Alborz: 12 personas; Khuzestan: 5 personas; Khorasan-Razavi: 4 personas; Isfahan: 4 personas; Zanjan: 4 personas; Lorestan: 3 personas; Markazi: 3 personas; Qazvin: 2 personas; Kohgiluyeh y Boyer Ahmad: 2 personas; Azerbaiyán Oriental: 2 personas; Ardabil: 2 personas; Ilam: 2 personas; Hamedan: 2 personas; Bushehr: 1 persona; Semnan: 1 persona.

El mayor número de muertes se registró los días 21, 22 y 30 de septiembre (el "viernes sangriento" de Baluchistán). El 4 de noviembre fue el día más sangriento de este mes, con 16 muertes registradas.

Las y los detenidos corren el riesgo de ser condenados a duras penas

Según los informes oficiales, decenas de manifestantes han sido acusados de los cargos relacionados con la seguridad de moharebeh (enemistad con Dios) y efsad-fil-arz (corrupción en la tierra), que conllevan la pena de muerte. La historia de la República Islámica y las pruebas actuales indican que pretenden utilizar la pena de muerte como herramienta de represión política para intimidar a su oposición. Hasta ahora, al menos nueve manifestantes han sido juzgados por cargos relacionados con la seguridad y corren el riesgo de ser ejecutados precipitadamente.

Las cifras de muertes publicadas son un mínimo absoluto. Todavía se están investigando los informes sobre los asesinatos de manifestantes en los últimos días. Derechos Humanos de Irán ha recibido un gran volumen de informes de muertes que sigue investigando con las interrupciones de Internet. Por tanto, el número real de personas muertas es sin duda mayor.