Las Fuerzas Unidas de Lucha (BMG) lanzó una campaña de tres meses bajo el lema "La emancipación solo se puede lograr a través de la revolución contra el hambre, el fascismo y la ocupación".

En un comunicado escrito sobre la campaña, el BMG expresó su preocupación por el hambre, el aumento de los precios, el desempleo, los problemas de vivienda y los feminicidios, y señaló que gran parte de la sociedad tiene una ansiedad por el futuro.

El comunicado señaló que los soberanos recurrieron a más presión y "tiranía" porque no tenían nada más que ofrecer a los y las trabajadoras y la sociedad en general:

“El estado fascista recurre al terror, la guerra y la ocupación. El uso desproporcionado de la fuerza por parte de la policía, las prohibiciones arbitrarias y las leyes especiales de censura se han generalizado para sofocar las voces de oposición y las fuerzas en lucha. Incluso las madres que luchan por la liberación de los presos enfermos son objeto de violencia policial. Insistiendo en políticas de guerra y ocupación, el fascismo ataca a todas las personas oprimidas con la fuerza, independientemente de su nacionalidad. Están tratando de evitar que los trabajadores turcos y kurdos, los alevíes y las mujeres caminen hombro con hombro y luchen juntos”.

La declaración señaló además que “La única forma de deshacerse del fascismo es la lucha común de todos los trabajadores y los oprimidos. Nuestra esperanza crecerá a medida que expandamos la resistencia y la lucha en las calles, cuando hagamos rendir cuentas a los opresores y cuando reclamemos nuestro propio futuro.

Una emancipación genuina de los oprimidos y los trabajadores es posible luchando contra el fascismo y echándolo en su conjunto al basurero de la historia. Llamamos a todos los oprimidos a luchar con la conciencia de que la revolución es el único camino hacia la emancipación de los trabajadores y la naturaleza”.