Décadas de lucha contra la cantera en Van

Los habitantes de Özyurt, en la provincia de Van, siguen luchando contra la empresa que explota una cantera de mármol en su pueblo. “Para nosotros no se trata de dinero, sino del medio ambiente y de nuestra salud”, afirma el agricultor Mehmet Yücel.

En el pueblo de Özyurt, en la provincia de Van, los aldeanos luchan contra una cantera de mármol. A mediados de la semana, surgieron tensiones entre los aldeanos y las fuerzas militares que se habían desplazado hasta el lugar en tanto que los soldados utilizaron armas de fuego y detuvieron temporalmente a cuatro personas.

La historia de la cantera comenzó en 2003, y debido a la resistencia de los residentes locales, la empresa DIMER dejó de extraer mármol en 2008. Durante doce años hubo paz en la cantera, hasta que el año pasado fue cedida a la empresa SAFBAZ.

‘No se trata de dinero, sino del medio ambiente’

Mehmet Yücel es uno de los habitantes de este pueblo. Dice que son insultados y oprimidos por el operador de la mina porque se oponen a la extracción de mármol. “Tenemos animales de granja en el lugar, ahora mismo hay 5.000 animales allí. No queremos dinero, sólo pensamos en nuestro derecho a vivir. No se trata de dinero, sino del medio ambiente y la salud”, dice el agricultor sobre la afirmación de que los aldeanos sólo protestan para obtener una compensación económica. “Es una mentira que rechazamos. Se han producido enfrentamientos, los niños se han caído. Sin embargo, sólo ha habido heridos leves, nadie ha resultado herido por los disparos. Ha habido detenciones, se han derribado establos. El pueblo está en una mala situación, cuarenta familias están afectadas, es decir, 300 personas. No queremos una cantera en nuestro pueblo”.

‘Mis hijos estaban en el establo’

El aldeano Iskan Dilek cuenta que la gente se resiste a la extracción de mármol desde 2008. Dice que la empresa explotadora ha derribado los establos y está haciendo imposible la tenencia de animales: “Nos resistimos y nos atacaron. Había niños, animales y comida en los establos. Los niños habían ido allí a alimentar a los animales. Al principio, la empresa ni siquiera nos permitió ir a buscar a nuestros hijos. Dije a la gente: ‘mis hijos están ahí, quiero recogerlos’. Estamos en contra de la cantera y seguiremos luchando contra ella”.