La última fase de la Operación Tormenta de Cizire lanzada por las SDF el 11 de septiembre sigue su curso.

A medida que las SDF avanzan contra el ISIS, en medio de cruentos enfrentamientos diarios, el pueblo de Hajin, en Deir ez-Zor, está huyendo de sus casas y encontrando refugio en las zonas liberadas por las SDF.

Los civiles que consiguen escapar de Hajin han hablado con la Agencia de Noticias HAWAR (ANHA) y han afirmado que han estado luchando para sobrevivir en condiciones de extrema dificultad debido a las atrocidades cometidas por el ISIS. Los residentes desplazados han comentado que el ISIS está amontonando tierra y plantando explosivos alrededor del pueblo en un intento de impedir que los civiles puedan huir además de impedir los avances de las SDF.

M.T. vecino de la localidad, ha dicho que en Hajin se está viviendo un desastre humanitario ya que no se permite la entrada de agua ni comida. M.T. también ha afirmado que los mercenarios del ISIS están almacenando los alimentos y que aquellos que permanecen en la localidad no tienen acceso a ellos como tampoco al agua que trae el río Éufrates. Debido a estas acciones de los mercenarios ya han muertos dos niños por desnutrición.

Según declaraciones de otros vecinos de Hajin, los mercenarios están cavando túneles en la ciudad y colocando minas en ellos y en las casas de aquellos que se han quedado en el pueblo, en un intento de impedir que puedan salir de la localidad.

Hisên El-Abdullah ha dicho que algunos residentes son capturados mientras intentan escapar y son ejecutados delante de todo el mundo en un intento de intimidar al resto de la población para que no escapen.

El-Abdullah ha añadido que existe una carestía de medicamentos añadida a los problemas de agua y alimentos.