“FIOM suma su voz para acabar con el silencio con el que la comunidad internacional parece ser testigo impotente de la dramática situación de los más de 7.000 presos políticos kurdos en huelga de hambre en Turquía para exigir el fin del régimen de aislamiento y privación de los derechos humanos elementales de Abdullah Öcalan”, dice el comunicado.

Y continúa: “La violación de los derechos humanos fundamentales y las condiciones de detención clasificables como tortura contra Abdullah Öcalan y numerosos presos políticos kurdos han sido tolerados durante demasiado tiempo sin una reacción adecuada de los gobiernos y parlamentos de los países de la Unión Europea”.

Recordando que hasta ahora ya han perdido la vida 8 personas, prosigue: “Mientras realizaban esta forma extrema de protesta sin una iniciativa urgente de la comunidad internacional hacia Turquía, muchos otros [activistas en huelga de hambre] permanecen en grave riesgo de muerte o de sufrir daños permanentes.

Ante este último episodio de violencia y tortura hacia la población kurda y su representación política por parte del Estado turco, expresamos nuestra plena solidaridad hacia las personas en huelga de hambre y, denunciando las serias responsabilidades del gobierno turco, instamos a una urgente y efectiva acción de la Unión Europea y los países miembros para poner fin al aislamiento de Abdullah Öcalan y restaurar las condiciones de humanidad y respeto de los derechos fundamentales de todos los presos políticos en las cárceles turcas”.

El comunicado está firmado por Francesca Re David, Secretaria General de la FIOM, y Stefano Maruca, de la Oficina Internacional de la FIOM.