El comunicado abre con una frase del gran escritor y premio nobel, Gabriel García Márquez, de su libro El amor en los tiempos del cólera: “Los seres humanos no nacen para siempre el día en que sus madres los alumbran, sino que la vida los obliga a parirse a sí mismos una y otra vez”.

El comunicado dice: “Mientras que la mayoría de nosotros nos referimos a nuestro cumpleaños con una fecha determinada, refiriéndonos al día de nuestro nacimiento físico, Abdullah Öcalan ha mencionado con frecuencia que él nació tres veces.

El tercer cumpleaños –después de su nacimiento físico y la fundación de la organización por la que mejor se le conoce, el Partido de los Trabajadores de Kurdistán o PKK– es su cambio de paradigma hacia el concepto de “civilización democrática”. Este renacimiento fue también, y de muchas distintas maneras, el renacimiento de la sociedad kurda. El 4 de abril de 2019 Öcalan celebra su 70 cumpleaños. Esto, si es que podemos hablar de celebración en algún sentido”.

De hecho, y como recuerda el comunicado, “Öcalan lleva en régimen de aislamiento más de 20 años. Desde 2011, ni siquiera se le ha permitido reunirse con un abogado, y desde abril de 2015, salvo un par de visitas de su hermano, no ha visto absolutamente a nadie fuera de la isla-prisión de Imrali. Ahora mismo, más de 7.000 personas están en huelga de hambre con una simple y sencilla demanda: acabar con el aislamiento de Öcalan”.

Después de 20 años en prisión –fue secuestrado en Nairobi el 15 de febrero de 1999–, Abdullah Öcalan sigue “tan presente como siempre”, dice el comunicado, que añade, “a través de sus ideas, incluso más que hace 20 años. Sigue inspirando a numerosas personas, incluyendo, pero no solamente, a revolucionarios del Norte de Siria o Rojava. Los libros que ha escrito desde la cárcel han sido traducidos a numerosos idiomas y están siendo leídos alrededor del mundo entero.

Las ediciones de sus textos han sido publicadas en lugares tan lejanos como Corea del Sur y Argentina, India, los Estados Unidos, Sudáfrica o Irán, por no hablar de las numerosas ediciones en Europa y Oriente Medio”.

En referencia a cuando Öcalan fue secuestrado, encarcelado y sentenciado a muerte, el comunicado continúa: “alrededor de su 50 cumpleaños, ya era un símbolo del renacimiento kurdo y su lucha de liberación. Hoy, en su 70 cumpleaños, es un símbolo de la lucha de las mujeres y de los pueblos oprimidos por su liberación y la autodeterminación en Oriente Medio y más allá. Felicitamos el tremendo esfuerzo llevado a cabo por Abdullah Öcalan tras los muros de la prisión y los millones de personas inspiradas por sus ideas y su lucha. Por eso hoy decimos: ¡Feliz cumpleaños, Abdullah Öcalan!”

El comunicado acaba con un llamamiento público “a celebrar con nosotros el 70 cumpleaños de Abdullah Öcalan, la vida, la libertad. También hacemos un llamamiento público para que os unáis a nosotros y a los activistas en huelga de hambre en la lucha contra el aislamiento y por la libertad, un paso que será crucial en el camino a la paz y la solución política del presente conflicto”.