HDP: “La comunidad internacional no debe permanecer en silencio ante los mortales ataques turcos”

Los co-portavoces de Asuntos Exteriores del HDP piden a la comunidad internacional que se pronuncie sobre los ataques turcos.

Feleknas Uca y Hişyar Özsoy, co-portavoces de Asuntos Exteriores del Partido Democrático de los Pueblos (HDP), han pedido a la comunidad internacional que se pronuncie sobre los ataques turcos.

En un comunicado, los co-portavoces del HDP han dicho: “La comunidad internacional no debe permanecer en silencio ante estos ataques mortales que constituyen una clara violación del derecho internacional y humanitario. Pedimos a la comunidad internacional, a nuestros amigos y a las instituciones internacionales, que tomen medidas inmediatas contra los ataques transfronterizos de Turquía y eviten otra catástrofe humanitaria”.

Hasta ahora, los ataques aéreos turcos han matado a trece civiles, entre ellos un periodista, y a quince soldados sirios, y han herido a muchas otras personas. Según fuentes locales, entre las infraestructuras civiles destruidas se encuentran un hospital, un silo de grano y una central eléctrica.

Los co-portavoces dicen en su declaración: “Estos ataques siguieron al atroz atentado con bomba que tuvo lugar en Estambul el 13 de noviembre de 2022, del que el gobierno turco culpó instantáneamente al Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) y a las Fuerzas Democráticas Sirias (SDF, por sus siglas en inglés). Ambos han negado rotundamente cualquier implicación en el atentado y han expresado sus condolencias a las víctimas. Las declaraciones del ministro del Interior turco han desconcertado más que revelado la verdad del atentado, creando muchas preguntas y confusión.

Puede que nunca lleguemos a conocer las fuerzas que están realmente detrás del atentado de Estambul y su propósito, pero una cosa está muy clara: el gobierno turco ha estado utilizando este atentado como pretexto y terreno de legitimación para impulsar su agresión contra los kurdos en Siria. El presidente Erdoğan está tratando de reunir el apoyo internacional para una nueva gran incursión en el nordeste de Siria antes de las elecciones del próximo año. En medio de la profundización de los problemas económicos, lleva a cabo su campaña electoral sobre la base de la guerra y el belicismo”.

En el comunicado también subrayan que “Turquía tiene un historial de bombas en el período previo a las elecciones y de elecciones sangrientas. En 2015, después de que el AKP perdiera la mayoría en el Parlamento en las elecciones de junio y convocara unas elecciones anticipadas para noviembre, la violencia se intensificó en todo el país; la gente fue objeto de varios ataques, incluidos atentados con bomba. En el atentado contra el mitin Trabajo, Paz y Democracia, en Ankara, murieron más de 100 personas, muchas de ellas simpatizantes del HDP, y más de 500 resultaron heridas. Entonces, el gobierno también culpó al PKK y demonizó al HDP como un discurso clave en su campaña electoral. Más tarde, se descubrió que el ISIS estaba detrás del ataque.

También sabemos que todas las elecciones turcas recientes han sido precedidas por una invasión en el nordeste de Siria: Jarablus antes del referéndum sobre el sistema presidencial en 2017, Afrîn antes de las elecciones presidenciales y parlamentarias de 2018, y Serêkanîye y Girê Spî antes de las elecciones locales de 2019. El presidente Erdoğan y sus aliados parecen haber iniciado ya su campaña electoral para las elecciones presidenciales y parlamentarias previstas para junio de 2023”.

Por último, los dos co-portavoces añaden que “Turquía, que es miembro de la OTAN y del Consejo de Europa, está utilizando el espacio aéreo controlado por Rusia para atacar a los kurdos de Kobanê y de muchas otras ciudades, que habían derrotado al ISIS con mucho sacrificio en 2014 y que continúan su lucha desde entonces. Hasta ahora, Turquía ha organizado impunemente estos ataques contra los kurdos del nordeste de Siria. Curiosamente, esta vez el régimen sirio tampoco ha planteado ninguna objeción firme”.

Y dirigiéndose a la comunidad internacional, los dos portavoces han afirmado que “no debe permanecer en silencio ante estos ataques mortales que constituyen una clara violación del derecho internacional y humanitario. Pedimos a la comunidad internacional, a nuestros amigos y a las instituciones internacionales, que tomen medidas inmediatas contra los ataques transfronterizos de Turquía y eviten otra catástrofe humanitaria”.